Como el "caso Cheryshev" está exprimido hasta la última gota, al menos en su aspecto jurídico, intentaremos hacer un análisis exclusivamente futbolístico del Cádiz-Madrid. Después de una gran temporada en el Villarreal, Denis Cheryshev se quedó en el Madrid convencido de que iba a tener un protagonismo razonable. Parecido al que le ha concedido hasta el momento Rafa Benítez a Lucas Vázquez, por ejemplo. Por eso, cuando le llegó la oportunidad de salir en un partido desde el inicio no es extraño que al hijo de Dmitri, el exdelantero del Sporting, se le olvidase una tarjeta que había recibido casi nueve meses antes. El caso es que, a los tres minutos, Cheryshev era el hombre más feliz del mundo al finalizar magníficamente un pase no menos magistral de James. Es justo el buen papel de estos dos jugadores en el Carranza lo que deja en mal lugar a Benítez, no su desconocimiento de la situación reglamentaria de un futbolista. El Madrid es mejor con James Rodríguez. Y, a la vista de la epidemia de bajas, Cheryshev podría aportar lo suyo. Y con todas las de la ley.