No pudo ser. Ana Villanueva ni tan siquiera pudo intentar el reto de cruzar el Río de la Plata porque las condiciones meteorológicas lo impidieron. La nadadora gijonesa tenía como su proyecto principal para este año el cruce entre Argentina y Uruguay, alrededor de 48 kilómetros, y para ello había entrenado durante muchos meses.

La organización de este cruce había dado fecha a Ana Villanueva para la semana pasada, pero nada más llegar ya le pusieron en antecedentes de que iba a ser muy complicado que pudiera intentarlo. No obstante, le señalaron que lo más factible era el pasado sábado. Villanueva pudo comprobar que las condiciones del río eran muy malas y que no mejoraban a medida que pasaban los días. Llegó el sábado y ni las autoridades de ambos países ni la Cruz Roja dieron permiso para el intento. "Crucé en barco hasta Colonia Sacramento que es el punto de partida del cruce y pude comprobar que efectivamente el río no estaba para nadar", reconoce la gijonesa a punto de retornar.

De hecho, un grupo de cuatro nadadores que iban a intentar también este reto, pero en la modalidad de relevos, se lanzaron al agua, pero finalmente fueron obligados a abandonar a medio camino. Y eso que su intento fue una semana antes y con las condiciones meteorológicas no eran tan malas.

Villanueva se tuvo que resignar, pero aprovechó para negociar una nueva fecha y será a finales de febrero o primeros de marzo.

"Es algo que tengo en mente y quiero intentarlo y formar parte de la historia del Río de la Plata, no sé cuando será, pero será. Solo espero que en el próximo intento no tener tan mala suerte", afirmó.