Bajan las aguas revueltas en el Avilés Stadium. Tras la no renovación de Luis Castro, el entrenador que logró el ascenso a Regional Preferente sin perder ningún partido, los jugadores mostraron hace anteayer su repulsa a una decisión que consideran "funesta". Ayer, agradecido por el apoyo recibido, Castro ahonda en los motivos, que en su opinión, han provocado su no continuidad y señala a la directiva: "Sé que estaba fuera desde hace dos meses". Y acusó en concreto a una persona: el directivo Borja Iglesias. "Se metió en parcelas donde no tenía que entrar". Por su parte, la directiva del Stadium prefiere templar gaitas y esperar a que la situación se tranquilice. El nuevo entrenador, Luis Valera, a quien esta situación le coge recién presentado, expresó que "hablará a partir del lunes con la plantilla".

Tras el comunicado de los jugadores, en apoyo a su exentrenador, el cual se realizó sin conocimiento de la directiva, Luis Castro explica la intrahistoria, que desde su punto de vista, le ha llevado a no sentarse en el banquillo la temporada que viene. "Hay una persona que este año se ha metido en una parcela que no es la suya. Creo que se ha equivocado". Esa persona no es otra que el directivo Borja Iglesias, a quien Castro acusa de "haber dado bajas sin consultar al cuerpo técnico y antes de que acabara el año".

El preparador no concretó nombres, pero confirmó que el portero Adrián Monteserín, "Monte", es uno de lo que apunta a no continuar. "Se le dijo antes de jugar contra el Avilés B. Por suerte, el chico es un fenómeno y vino a jugar. Pero nos podía haber dejado sin portero en la última jornada de Liga, cuando nos jugábamos quedar imbatidos", apuntó Castro sobre un jugador que además acumula cerca de nueve partidos sin encajar un gol.

"Yo sé que estaba fuera desde hace dos meses. Gente conocida mía, antes de lograr el ascenso, me preguntaba que por qué no iba a seguir. Lo iba comentado por ahí, por las cafeterías. No son formas de hacer las cosas", criticó. "No le guardo rencor al Stadium. En el fútbol estas cosas pasan. El año pasado no logramos el objetivo y no me echaron. Sé que soy un ave de paso, y le deseo suerte a la directiva y al club; soy socio fundador", remató.

En el otro lado, el directivo Borja Iglesias prefirió no hacer declaraciones, aunque deslizó su sorpresa por las acusaciones de Castro, sobre todo en lo tocante a las bajas de los jugadores. El resto de dirigentes mantuvieron una reunión ayer, donde dejaron clara su postura: esperar. En dicha reunión se buscó una fecha para la asamblea de presupuestos, para la que todavía no se ha fijado el día. Si bien, tal y como ha podido saber LA NUEVA ESPAÑA, el Stadium no está especialmente preocupado por la situación, ya que entienden esto como una circunstancia más de la temporada, que ha sido exitosa.

El último en llegar, Luis Valera, al que esta situación le pilló pocas horas después de su presentación como nuevo entrenador, tampoco está ansioso por lo acontecido. Su objetivo es reunirse el lunes con la plantilla para pulsar los ánimos. A partir de ahí iniciará las conversaciones para dilucidar qué jugadores seguirán en Regional Preferente.