Oviedo, M. M.

Los concesionarios asturianos se vieron ayer desbordados de clientes que acudieron personalmente o llamaron por teléfono porque tienen sus coches reservados y han pagado una señal y que no saben si ahora se podrán beneficiar de la ayuda de 500 euros del Principado.

La supresión de esta bonificación al acabarse el dinero, como ayer publicó LA NUEVA ESPAÑA, hizo saltar todas las alarmas. Los concesionarios recibieron cientos de llamadas telefónicas con una única pregunta: «¿Qué pasa con mi coche?».

Algunos clientes llevan varios meses con el vehículo reservado y esperando que se les entregue. La patronal del sector, Aspa, asegura que la media de espera, según el coche y el modelo que se haya reservado, es de seis semanas.

Pero varios clientes confirmaron ayer a este periódico que llevaban esperando desde finales de mayo y principios de junio, y algunos añadieron que ya les han retrasado de nuevo la fecha de entrega para octubre. Esos pedidos se vieron además retrasados al coincidir agosto, mes en el que estaban paradas las fábricas.

Manuel García Arenas, presidente de Aspa, explicó que «desde que a principios de septiembre hablamos con la Consejería para plantearle el problema, no supimos si estaban buscando alternativas o no. No nos dijeron nada. Ahora nos enfrentamos nosotros al enfado de los clientes, ¿y qué les decimos?».

Lo primero tranquilizar, afirma, y asegurar que se busca una solución. «Pero lo cierto es que no sabemos qué va a pasar con 1.600 personas que esperan sus coches desde hace semanas y a las que a lo mejor hay que decir que no tienen ese descuento», concluyó.