Oviedo, Javier CUARTAS

La fusión virtual que lidera Cajastur propuso ayer a los sindicatos de las cuatro cajas integrantes y del banco CCM un plan de prejubilaciones voluntarias al que podrán acogerse los empleados que tengan al menos 55 años el 31 de diciembre próximo y que además cuenten con una antigüedad laboral mínima de diez años. Según cálculos sindicales, a esta medida podrán acogerse en el conjunto del grupo (integrado por Cajastur, CAM, Caja Extremadura, Caja Cantabria y Banco CCM), unos 1.800 empleados, de los que en torno a 200 corresponderían a la plantilla de Cajastur.

La propuesta empresarial se planteó en una nueva reunión, celebrada ayer en Madrid, para la negociación del plan laboral de la futura fusión virtual, que dará lugar al quinto grupo financiero español y a la tercera agrupación más relevante de cajas.

De acuerdo con la propuesta empresarial, se mantiene la pretensión de suprimir 2.000 de sus 14.000 empleos (el 14,28% de su plantilla) y clausurar 400 de sus 2.300 oficinas (el 17,39% de su red de sucursales).

De acogerse a la prejubilación los 1.800 trabajadores que, según estimaciones sindicales, cumplirán el 31 de diciembre las condiciones que plantea la empresa, quedarían por ajustar en torno a otros 200 empleos, para los que se barajan ofrecer bajas incentivadas, rescisión unilateral de contratos, suspensiones contractuales, reducciones de jornada u otras alternativas, comentaron miembros de la mesa en representación de la plantilla. Esos doscientos empleos ajustables por estas vías podrían aumentar en la medida en que no todos los 1.800 empleados prejubilables se acogiesen a esta salida.

El grupo de las cuatro cajas siempre sostuvo que su plan laboral excluye medidas traumáticas, y así se recoge en el «pacto de garantías» suscrito el 17 de septiembre con UGT, CC OO y CSIF.

Según varios sindicatos, las condiciones que se proponen de partida son «inasumibles», pero se entiende que ese extremo, como los demás aspectos, forman parte de una negociación que está comenzando.

Los sindicatos expresaron ayer malestar porque las cajas no han precisado aún cómo afectará el recorte de empleo y oficinas en cada entidad y región. La próxima reunión se celebrará el 14 de octubre.

Las condiciones genéricas que se plantean para poder acogerse a la prejubilación podría constreñirse en algunos casos por criterios de funcionalidad y de la reestructuración de la red. Sí se anunció ayer, no obstante, que los criterios que se aplicarán para determinar qué trabajadores se pueden prejubilar serán lineales para todas las entidades del grupo. Es decir, la edad de prejubilación y demás requisitos serán comunes. En principio se preveía que pudieran haber diferencias en función de la estructura de plantilla de cada entidad financiera.

Los sindicatos, que se declararon «recelosos» ante una oferta que juzgaron «manifiestamente mejorable», plantearon una negociación que abordase y fuese cerrando cuestión a cuestión, mientras que la empresa ha decidido que la negociación se aborde en bloque y de forma conjunta con todos los temas porque, a su juicio, el acuerdo final debe ser global. Los sindicatos juzgaron como «vago y genérico» un borrador de plan que se les entregó ayer.