Oviedo / Madrid, Agencias

El proyecto de ley de la reforma laboral completó ayer su tramitación en el Congreso con una treintena de enmiendas pactadas por el PP con algunos partidos de la oposición, que en algunos casos endurecen el texto. Así ocurre con un cambio incluido a propuesta del diputado de Foro Asturias, Enrique Álvarez Sostres, que limita a un año la prórroga automática de los convenios en caso de desacuerdo entre la empresa y la representación de los trabajadores. Otros acuerdos del PP con CiU afinan los requisitos para aplicar el despido barato por razones económicas y amplían la capacidad del empresario de modificar de manera unilateral las jornadas de trabajo.

Hasta la reforma laboral (ya en vigor como decreto desde el pasado febrero), las condiciones generales de un convenio colectivo podían prorrogarse indefinidamente, aunque encallaran las negociaciones del nuevo. Era una aspiración de las organizaciones patronales suprimir ese principio, denominado «ultraactividad». El decreto del PP puso límites a la ultraactividad, fijando que la prórroga automática de los convenios no puede superar los dos años. A propuesta de Foro, ese límite se queda ahora en un año, en línea con los intereses de la patronal.

La Comisión de Economía de la Cámara baja también aprobó, tras un pacto entre PP e IU, elevar del 5 al 10 por ciento el volumen de jornadas de trabajo que, cada año, puede modificar el empresario de manera unilateral (con un preaviso de cinco días al trabajador) por necesidades de la producción. Se flexibiliza, además, la obligación de los empresarios de ofrecer formación a sus plantillas.

El acercamiento entre PP y CiU ha propiciado también cambios en el despido por absentismo, del que quedan excluidos los enfermos crónicos. Para aplicar este despido se deben dar dos condiciones: por un lado, haber faltado, aunque sea por enfermedad, el 20% de las jornadas laborales en dos meses consecutivos o el 25% en cuatro meses alternos, y, por otro lado, haber faltado durante el último año el 5% de las jornadas. En el cómputo entran las bajas de enfermedad inferiores a 20 días de duración.