El comité de empresa de Arcelor Mittal de Salvatierra (Álava) anunció ayer que ha conseguido alcanzar un acuerdo con la dirección que supondrá la continuidad de la planta gracias a la presentación de un proyecto industrial para la misma, aunque se abordarán ajustes de personal, presumiblemente por vías no traumáticas. El acuerdo se alcanzó tras una huelga iniciada el pasado 7 de enero y que "ha sido secundada por todos los trabajadores", aseguraron los representantes sindicales.

Arcelor Mittal anunció a los sindicatos el pasado 19 de diciembre la presentación de un expediente de regulación de empleo (ERE) de rescisión de los 54 puestos de trabajo de su planta en Álava, argumentando que "no había mercado" para el producto que se fabrica en Salvatierra, donde cortan el acero y hacen farolas y báculos para semáforos.

Los sindicatos aseguraron que el acuerdo alcanzado con la dirección incluye el compromiso de la siderúrgica de presentar un nuevo proyecto industrial, "desechando por tanto el cierre de la planta". La compañía también se ha comprometido a iniciar las negociaciones de posibles "salidas no traumáticas de personal, explorando diferentes vías", tales como prejubilaciones, excedencias o traslados, entre otras opciones. Los trabajadores informaron también de que Arcelor Mittal se ha comprometido a no iniciar el periodo de consultas del ERE "hasta que no se agoten todas las posibilidades" tanto de presentar el nuevo proyecto, como las formulas de reducción de plantilla alternativas al despido.

Desde el inicio de la crisis, Arcelor ha cerrado en España una fábrica situada en Villaverde (Madrid). El grupo siderúrgico prescindió allí de una planta orientada a suministrar acero al sector de la construcción. Ante el hundimiento del negocio, Arcelor decidió la clausura a principios de 2012, con la supresión de 390 puestos de trabajo. Al menos parte de los trabajadores fueron recolocados en otras plantas.