Las empresas españolas tienen un problema serio de tamaño y en Asturias esa carencia "es un poco mayor", según se puso de manifiesto ayer en un encuentro empresarial convocado por la patronal FADE. Su presidente, Pedro Luis Fernández, alertó de que la falta de dimensión de las compañías hace que la región pierda competitividad porque los cambios en el mercado global exigen capacidades de innovación y de internacionalización muy difíciles de alcanzar por los negocios más pequeños. Según datos oficiales, Asturias consiguió en el último año aumentar el número de empresas, si bien la ganancia se concentró en el segmento de los autónomos que no tienen asalariados.

La FADE presentó ayer ante decenas de empresarios la alianza denominada "Increase", un programa de apoyo al crecimiento de las compañías asturianas que ofrecerá asesoramiento y financiación a pymes con facturaciones comprendidas entre los 15 y los 50 millones de euros y potencial de expansión. Durante ese acto, Pedro Luis Fernández subrayó que España debería marcarse el objetivo estratégico de acercarse al perfil de la demografía empresarial de Alemania, un país con un número muy importante de grandes compañías, pero sobre todo con un tejido mediano muy potente. "Nuestras empresas grandes y medianas son tan productivas como las suyas; el problema es que tenemos pocas", dijo el presidente de la FADE.

Las empresas con más de 50 trabajadores representan sólo el 0,5% del total de las asturianas y su número descendió el 30% durante la crisis. Se perdieron tantas compañías de dimensión mediana como las que se habían ganado entre 2000 y 2008, en lo más alto del ciclo de expansión de la economía. Muchas de aquellas compañías que alcanzaron ese tamaño y que fueron desapareciendo pertenecían al sector de la construcción o a su industria auxiliar.

Durante el último año, según datos recogidos por la propia FADE en sus informes, Asturias consiguió detener la caída del número total de empresas, que aumentó en algo más de 1.100 (hasta las 67.451) después de seis años consecutivos de pérdida de tejido productivo. Los datos están extraídos del directorio central de empresas del Instituto Nacional de Estadística (INE), una fuente que utiliza el concepto de empresa en sentido amplio, incluyendo a todos los negocios por pequeños que sean y aunque no tengan asalariados. Fue en este segmento de las empresas sin trabajadores por cuenta ajena (el 54% del total en Asturias) donde se ha concentrado el aumento de empresas (1.800 más). Se trata una tendencia análoga a la del conjunto del país y que un estudio recién publicado por la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas), obra del investigador del IESE Ramón Xifré, relaciona más que con el emprendimiento con la sustitución de contratos de trabajo por relaciones empresariales entre sociedades y autónomos.

La iniciativa "Increase" brindará apoyo a empresas asturianas que quieran crecer mediante procesos de expansión orgánica o a través de compras o fusiones con otras compañías. El programa de FADE se desarrolla con la colaboración del Banco Sabadell-Herrero y el apoyo técnico de Llana Consultores, ILP Abogados, Ontier, Torsa Capital y Vaciero Corporate. Pablo Junceda, director general del Sabadell-Herrero, subrayó durante la presentación de "Increase" cómo el tamaño de las empresas es un factor clave para salir a los mercados exteriores e innovar.