Con 41 diputados y 643.713 votos, el 45,52 por ciento del total, el PP ha estado a punto de igualar en Galicia su mejor resultado, los 43 escaños alcanzados en 1993, pese a que desde entonces ha perdido unos 145.000 votos. Los populares han logrado la mayoría absoluta en 202 de los 315 ayuntamiento gallegos.

Con la pérdida de votos concentrada en La Coruña y Pontevedra, el PP consideró «histórico» su triunfo en las urnas al lograrse en un momento de crisis económica y habida cuenta de que el desgaste sufrido por sus adversarios en las urnas ha sido mayor, a excepción de la fuerte irrupción de Xosé Manuel Beiras al frente de Alternativa Galega de Esquerda (AGE) en coalición con IU, que logra 9 escaños y supera al BNG, que queda en siete y tenía doce.

El desplome de socialistas y BNG es el que ha permitido al PP enjugar la pérdida de apoyos y traducirla en tres escaños más, al pasar de 38 a 41 diputados. El PP ha ganado escaños en La Coruña, Lugo y Orense, y ha mantenido los once de 2009 en Pontevedra.

Mientras en La Coruña y Pontevedra ha perdido un número considerable de votos, en Lugo y Orense ha reforzado su supremacía, con el 50,85 y 48,72 por ciento de los apoyos, respectivamente.

La Coruña y Orense son precisamente las circunscripciones en las que la coalición de Beiras obtuvo el domingo sus mejores resultados, convirtiéndose en la segunda fuerza en 21 localidades, entre ellas La Coruña y Santiago. En Ferrol fue tercera, a un solo voto del PSdG.