Ribadesella, B. MORÁN

El estreno llegó y fue todo un éxito. Más de doscientas personas aplaudieron y ovacionaron en la Casa de Cultura de Ribadesella a la periodista Menchu Álvarez del Valle; al empresario Emilio Serrano; a la directora del IES de Ribadesella, Myriam Pando, y a Emilio Ureta, actor y director de la obra «Señora Loman», una adaptación de la obra que encumbró al escritor Arthur Miller en 1949 y que se titula «Muerte de un viajante».

Una historia dramática que narra la desolación de un viajante que, tras haber trabajado toda la vida, no alcanza el ilusorio «sueño americano». Esta cita con el teatro crítico de Miller que subió a las tablas del escenario a la popular periodista y al famoso empresario de Licores Los Serranos fue impulsada por la tertulia femenina «Garabato», de Ribadesella, que integró esta actuación en un rico programa de actos con los que por segundo año rindieron tributo a todas las mujeres del mundo.

La abuela de la Princesa de Asturias llegaba a la sala cultural riosellana acompañada de su hija Henar Ortiz y confesaba a los medios de comunicación que la aguardaban, entre bromas, que estaba un poco nerviosa. Aunque pocos nervios demostró en el escenario interpretando a la protagonista de la historia, Linda Loman. Un personaje con el que la periodista confesaba «no sentirse identificada» aunque señalaba al tiempo que las mujeres «suelen ser siempre las que llevan el peso de la casa». Muy sonriente, como es habitual verla, Menchu no dudaba al resaltar la labor del riosellano Emilio Ureta en la dirección y adaptación de la obra de Miller. «Gracias a su esfuerzo y trabajo en la adaptación maravillosa que ha hecho de la obra, estamos aquí; que Dios reparta suerte», dijo entre bromas la periodista antes de subirse al escenario. Emilio Serrano, el otro actor improvisado de esta obra solidaria, encandiló al público con su naturalidad y gracia. Cuando el telón subió, el público se quedó en silencio, quieto y sin perder de vista el escenario donde todos los actores hicieron sonreír, emocionaron y lograron transmitir ese homenaje a todas las mujeres como Linda Loman, que siempre piensan en el bien para su familia, en cuidarla y mantenerla unida.

«Nos encantó; los actores, de diez», decían entusiasmadas varias mujeres de Ribadesella al salir de la obra, que concluyó con Menchu en solitario, llorando por el trágico suicidio de su marido en la obra. «Manos curtidas» ofreció también una entrevista de Álvarez del Valle a la artista Lilian de Celis, y el fundador y director de MRW, Francisco Martín Frías, fue premiado por ser un ejemplo, ya que de la nada fundó un imperio.