M. C.

El candidato del PSOE a la Presidencia del Principado, Javier Fernández, eludió ayer polemizar con los dirigentes socialistas avilesinos que reprocharon la exclusión de la lista socialista para las elecciones autonómicas de Álvaro Álvarez y otros destacados socialistas avilesinos, como el ugetista Luis Ángel Colunga.

El secretario general del PSOE de Avilés, diputado en las tres últimas legislaturas autonómicas y persona afín al ex presidente regional Vicente Álvarez Areces, fue apeado de la candidatura socialista a las elecciones del próximo 25 de marzo. Álvaro Álvarez también fue en su día el candidato que impulsó Areces para confrontarse con Javier Fernández por la secretaría general de la FSA. Destacadas figuras del socialismo asturiano, como la diputada Mariví Monteserín o el ex alcalde avilesino y ex delegado del Gobierno Manuel Ponga, criticaron la defenestración de Álvaro Álvarez.

Tras una reunión ayer en la sede de UGT de Gijón con dirigentes ugetistas del sector del metal, Javier Fernández evitó echar más leña al fuego y se limitó a responder a los periodistas que la confección de la lista autonómica «se cerró el sábado en el comité, en el que se habló del asunto y no voy a hacer ninguna valoración a posteriori».

Javier Fernández añadió, respecto a los reproches de los disconformes con la exclusión de dirigentes avilesinos, que «todo el mundo tiene derecho a opinar, pero ese asunto está cerrado por el comité y votado».

Javier Fernández también indicó en la rueda de prensa, convocada para mostrar su preocupación por la situación de la factoría gijonesa de Arcelor, que acudirá el próximo domingo a la manifestación, convocada por los sindicatos en Gijón, en protesta contra la drástica reforma laboral pergeñada por el Gobierno de Mariano Rajoy.

Fernández considera que con esa reforma se produce un «desequilibrio total respecto a las relaciones de poder en la empresa», dejando sin fuerza a los representantes de los trabajadores.