La magnitud de los barcos pesqueros que está construyendo el astillero gijonés la explicaba ayer gráficamente uno de los invitados al acto, el director de pesca del Principado, Alberto Vizcaíno, señalando que la capacidad de pesca del "Oaxaca" multiplica por diez la de toda la flota bonitera asturiana junta: Unas 2.000 toneladas pueden almacenar en sus bodegas la veintena de boniteros asturianos, frente a las 20.000 toneladas de las del "Oaxaca".

Con 79,05 metros de eslora total, 13,65 de manga de trazado y 8,67 de puntal a la cubierta superior, su capacidad teórica para procesar y congelar atún a 28 grados bajo cero es de 160 toneladas al día, si bien la tripulación, por su experiencia, espera que se puedan alcanzar las 200 a 240 toneladas al día, que se almacenan en 19 cubas que suman 1.600 m3, en las que tiene capacidad para 19.000 toneladas y en otra cámara especial para los túnidos de gran tamaño. Puede llevar hasta 27 tripulantes.

Se trata de un barco muy maniobrable, cuyo timón se maneja en el puente de mando con un joystick y que puede alcanzar los 18 nudos de velocidad. Tiene que ser rápido y ágil para seguir los bancos de atunes.

Sus depósitos de 250.000 litros de combustible, que alimentan un motor de 5.000 caballos, le permiten una autonomía de 60 a 70 días de navegación. Su desplazamiento máximo es de 3.200 toneladas. Cuenta con una planta desalinizadora para que la tripulación pueda disponer de agua dulce y de un helipuerto. Aunque es un barco gemelo al "Gijón", ha sufrido pequeños cambios, mejoras habituales en las construcciones seriadas de barcos.

Los atuneros son el tipo de pesquero más complejo. El "Oaxaca" es el cuarto atunero que entrega Armón Gijón, tras el "Gijón", el "Galerna II" para Albacora y el "Tamara" para Pesca Azteca. La próxima semana entregará el quinto, el "Paco C", atracado en el Espigón II de El Musel junto al "Oaxaca". En el astillero están en construcción otros cuatro pesqueros, uno para Grupomar, otro para Pesca Azteca y dos más para un armador de EE UU.