La Policía Nacional de Gijón ha recibido, en quince días, dos denuncias por envenenamiento de perros. El primer caso tuvo lugar a finales del pasado mes de agosto. Fue entonces cuando una gijonesa se dirigió a las dependencias de la Comisaría de El Natahoyo para poner en conocimiento de los agentes de la oficina de denuncias los daños que había sufrido su perro después de ingerir un trozo de salchicha en el que alguien había escondido varios alfileres. El suceso, que a punto estuvo de costarle la vida al animal, había tenido lugar en las inmediaciones del parque de los Pericones. Unos días después, ya en septiembre, la historia se repitió. En esta segunda ocasión el perro de la segunda denunciante se infectó con veneno en la zona del campus universitario.

La Policía trabaja ahora sobre ambos casos. Las investigaciones para dar con los responsables de los hechos llegan justo en la misma semana en la que el Ayuntamiento se han comprometido a luchar contra estos casos de ataque a los animales. La comisión de Movilidad reunida hace días aprobó una iniciativa del PSOE para vigilar de cerca este tipo de prácticas. Los socialistas se hacían eco de una petición popular nacida a través de la web de recogida de firmas change.org, que permite la participación de ciudadanos de todo el mundo.

La única vez que en Gijón se produjo un juicio contra un hombre acusado de estos envenenamientos el imputado fue absuelto por falta de pruebas.