Langreo, E. PELÁEZ

La comarca sufrió ayer un corte de suministro eléctrico a partir de las doce menos cuarto de la mañana, que en Langreo, el municipio más afectado, se extendió durante 45 minutos. El servicio quedó restablecido antes en San Martín del Rey Aurelio, Laviana, Sobrescobio y Caso, que permanecieron sin fluido eléctrico durante alrededor de 17 minutos.

La avería fue causada por una grúa que trabaja en la construcción de los accesos al nuevo Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), que accidentalmente dañó una de las líneas que alimentan a la comarca del Nalón desde la subestación de La Corredoria (Oviedo), según aseguraron fuentes de HC Energía, la compañía suministradora. El corte, que se extendió también a varias áreas del concejo de Parres, afectó en desigual medida a todo el valle del Nalón, en el que residen 81.246 personas.

El municipio de Langreo, que agrupa a más de la mitad de los habitantes de la comarca del Nalón, superando los 45.000, no recuperó la normalidad hasta las doce y media del mediodía. Durante ese periodo muchos de los vecinos que se pusieron en contacto con la compañía eléctrica escucharon una locución que les informaba de que HC era conocedora de la existencia de la avería y que estaba trabajando para solucionarla.

En una jornada en la que se celebra el mercado semanal en Sama, con el consiguiente aumento de afluencia, el tráfico se vio afectado ya que los semáforos dejaron de funcionar. No se produjo, sin embargo, ningún incidente, según aseguró la Policía Local, ya que «los cruces están debidamente señalizados» en previsión de circunstancias como la sucedida ayer y para que no se originen problemas en el tránsito. A esto se unieron las retenciones en pasos a niveles como el de la Joécara, debido a que las barreras quedaron cerradas por motivos de seguridad, según informaron desde Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias). A las doce y cuarto del mediodía, tras treinta minutos, se restableció la situación. La avería provocó una falta de tensión en la catenaria y en la línea de señales de los trayectos Soto de Rey-El Entrego y Tudela Veguín-Lugo de Llanera pero no se produjeron retrasos ni suspensiones en los servicios ferroviarios previstos, subrayaron fuentes de Renfe.

Balanzas que no pesaban, cajas registradoras que detuvieron su labor y locales a oscuras impidieron a los supermercados y tiendas de comestibles continuar con su tarea cotidiana durante cuarenta y cinco minutos. Aunque, apuntan desde uno de estos establecimientos de una gran cadena, los productos congelados y refrigerados no resultaron afectados ya que el corte de suministro eléctrico no fue tan prolongado como para dañarlos. Sin embargo, la actividad se paralizó durante esos tres cuartos de hora que han sido suficientes para retrasar la preparación de las comidas en restaurantes y sidrerías. «En varios establecimientos sirven la comida a la una de la tarde pero hoy (por ayer) hasta la una y media no pudieron empezar a servir comidas», destacó Marcelino Tamargo, hostelero y presidente de Acoiván (Asociación de Comerciantes e Industriales del Valle del Nalón). El corte de fluido eléctrico, indicó, «afecta siempre y en este caso fue a una hora muy importante para la hostelería, cuando los clientes toman el café y el pincho». En este periodo de tiempo, señaló, «no da tiempo a que descongelen los productos perecederos pero te paraliza la actividad», apuntó Tamargo.

En el establecimiento en el que trabaja Carmen Fernández en Sama, en el que se vende pan y repostería pero también fruta, el apagón no llegó a parar por completo la actividad pero la redujo en gran medida. «El pan ya lo había sacado todo del horno pero no podía pesar la fruta. Menos mal que no se prolongó», señaló.