IU reclamó ayer que el alcalde de Caso y presidente de la Mancomunidad del Nalón, Tomás Cueria, abandone su cargo al frente del ente supramunicipal -al que accedió en enero- hasta que se sustancie el proceso judicial abierto por presunta prevaricación en la contratación de una empresa para acometer desbroces en Caso. La coalición entiende que no puede haber acuerdos en el seno de la Mancomunidad cuando "la persona que ocupa el cargo de presidente está pendiente de que se resuelva una investigación por prevaricación". "Debería dimitir y apartarse hasta que haya una resolución judicial", aseguró ayer Jonatan López, edil de IU de Langreo y nuevo portavoz de la coalición de izquierdas en la entidad comarcal.

La Fiscalía, que abrió una investigación a raíz de una denuncia de IU, cree que existen indicios de un posible delito de prevaricación administrativa en el seno del Ayuntamiento de Caso, por lo que remitió las diligencias al Juzgado de Laviana, por si los hechos pueden ser constitutivos de una infracción penal y para que se tome declaración en calidad de imputado a Cueria. El regidor ya aseguró el pasado sábado sentirse "muy tranquilo", ya que, aunque haya podido producirse algún "error administrativo", en "ningún caso se ha actuado de mala fe".

En IU el posicionamiento es distinto. "No creemos que sea conveniente que una persona que está siendo investigada por una presunta contratación irregular esté al frente de la Mancomunidad. Por eso pedimos que se aparte", indicó López, que también indicó que ve muy difícil que haya "consensos" en el seno del ente supramunicipal si no hay un cambio de rumbo "en las formas de hacer las cosas del PSOE". "Nosotros no vamos a la Mancomunidad con la idea de cargárnosla. Pero si iremos con un espíritu crítico con la manera de actuar del PSOE en estos 30 años".

El portavoz de IU reiteró que el Ayuntamiento de Langreo está pendiente de un auditoría para saber lo que cuesta al concejo el ente y los servicios que recibe. "Durante décadas no se ha dado peso político al organismo y se ha preferido duplicar servicios o adoptar fórmulas como la empresa mixta de aguas en lugar de comarcalizar la gestión. Es falso que si un ayuntamiento abandona el ente peligre el empleo porque son trabajadores públicos se recolocarían en el Consistorio en el que fueron contratados o en otras administraciones".