El portavoz municipal del PSOE en Degaña, Víctor Luis Pérez, dimitió ayer tras la apertura del juicio oral en el que está imputado por un supuesto delito de lesiones. Los hechos se remontan al 13 de julio de 2012, en pleno conflicto minero, cuando Pérez y cuatro compañeros mineros fueron detenidos por la Guardia Civil tras agredir, presuntamente, a un capataz de la mina de Cerredo, propiedad de la empresa Uminsa. LA NUEVA ESPAÑA trató sin éxito, ayer, de contactar con Pérez para conocer su versión.

Por su parte, la Federación Socialista Asturiana (FSA) respeta la decisión del edil ya que se ajusta a los criterios éticos que pide el PSOE a sus representantes políticos. El juicio se celebrará el 12 de enero en los Juzgados de Oviedo.

Desde el primer momento, los cuatro imputados negaron su participación en los hechos, aunque sí admitieron que estaban en el lugar del incidente. La paliza se produjo después de que el capataz trasladase en todoterreno a tres mineros que habían quedado atrapados en un pozo. Un rescate de cuatro horas que se realizó en malas condiciones, según los trabajadores presentes, en referencia a que el capataz, un ingeniero técnico de mala fama entre los compañeros, utilizase dinamita para abrir camino y llegar hasta a los mineros atrapados.

Cuando el capataz entró en Cerredo, con los tres trabajadores en el vehículo, le esperaba un grupo de unos dos centenares de personas muy enfadadas. El ambiente estaba cargado de tensión porque los trabajadores consideraban que el rescate no se había realizado en condiciones de seguridad aceptables. Entonces, un grupo de los participantes en la protesta zarandeó al capataz. En esos momentos de nerviosismo, en mitad del tumulto, se produjo la supuesta agresión.

Sin embargo, el ingeniero técnico, que ya no trabaja en Uminsa, no denunció la paliza. Aunque sí se abrió una investigación de oficio para esclarecer el suceso. Y es que tras los hechos, los cinco mineros pasaron la noche en el cuartel de Rubín (Oviedo). Y al día siguiente prestaron declaración en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Cangas del Narcea. La juez les dejó en libertad a la espera de resolver el litigio en el juicio, que comenzará el próximo mes de enero.

La dimisión de Pérez se conoció durante la mañana de ayer tras un comunicado emitido por el Ayuntamiento de Degaña, a petición del PSOE. Así, el portavoz municipal socialista cursó su baja como edil de la Corporación en una escueta nota de prensa: "Una vez que hace escasos días puso en conocimiento de la dirección regional de la FSA-PSOE y de sus servicios jurídicos el auto abierto en el que se le imputa un presunto delito de lesiones por un conflicto minero en Coto Minero Cantábrico (CMC), el portavoz socialista, atendiendo al criterio de responsabilidad ética establecido en su momento por la FSA-PSOE, que ha sido asumido también por la dirección federal del PSOE, y toda vez que en el citado auto figura la apertura de juicio oral, presenta su dimisión".

Ahora la FSA-PSOE respeta la decisión de Pérez, si bien cuando se produjeron los hechos, en el verano de 2012, la formación política salió en defensa de su portavoz en Degaña.

La secretaria de política municipal del partido, Adriana Lastra, calificó de "verosímil" la explicación que ofreció Pérez sobre los hechos. Es más, apuntó que, además de la presunción de inocencia, la versión del edil fue ratificada por más personas, entre las cuales se incluyen agentes de la Benemérita.

Por su parte, el Partido Popular cargó contra Pérez. El grupo popular, en palabras del coordinador del Suroccidente, Matías Feito, consideró que el conflicto dañase la imagen del concejo de Degaña. Ya en aquel momento el PP pidió la dimisión o la destitución del portavoz municipal del PSOE, quien afronta ahora la apertura del juicio oral.