El incendio declarado en el interior de la mina de Carbonar, situada en Vega de Rengos (Cangas del Narcea), se ha dado por extinguido después de haber procedido a la inyección de nitrógeno gaseoso a través de las tuberías. El objetivo era enfriar la zona afectada y lograr ahogar la combustión, y la técnica parece haber tenido el efecto deseado, puesto que desde el martes, día 27, se puede decir que el fuego interno de la explotación minera está apagado.

Fue el martes cuando la Brigada de Salvamento Minero pudo entrar en la mina para constatar que efectivamente los trabajos realizados hasta entonces habían dado sus frutos y que el incendio se podía dar por extinguido. Por lo que ayer mismo los trabajadores de la empresa se pusieron a realizar las labores de achique del agua acumulada en las galerías, ya que desde un primer momento el riego fue la fórmula que se utilizó para intentar sofocar la quema.

La mina llevaba ardiendo por dentro, en la sexta planta, desde hace más de un mes, en concreto, desde los días 22 y 23 de enero. Hasta el pasado viernes, la forma de enfrentarse al incendio fue el uso del agua, que llegó a inundar la mina hasta la planta afectada por el fuego. A finales de la semana pasada fue cuando llegó el nitrógeno a la mina, que tras su inyección y después de dejar unos días para facilitar su estabilización, ha demostrado su eficacia.

Aunque el incendio ya esté apagado, la vuelta al trabajo de extracción en la mina aún podrá tardar semanas. Además, de las labores de achique del agua también comienzan los trabajos para valorar los daños que ha provocado este incidente, para conocer el alcance que ha tenido y la cuantía económica que supondrá. Un proceso que está previsto que se alargue, igual que la extracción del agua del interior de la mina.

Para realizar estos trabajos de nuevo habrá colaboración entre la Brigada de Salvamento Minero y la empresa, que dispondrá de unos servicios mínimos para continuar trabajando en el mantenimiento de la explotación y las nuevas labores de achique.

Para estos trabajos no será necesario el medio centenar de empleados de la plantilla de la empresa; no obstante, en el comité de empresa aseguran que aún no han recibido ninguna noticia por parte de la empresa sobre su futuro. De este modo, los trabajadores que no forman parte del equipo de servicios mínimos continúan agotando días de vacaciones.

Por el contrario, desde principios del mes de febrero, Carbonar decidió prescindir de sus empresas auxiliares, dejando sin trabajo a 120 empleados.

Es la primera vez que la mina de Carbonar vive una situación como esta en el que su interior ha comenzado a arder, aunque ha habido otros pozos tanto de Asturias como de España donde se han producido incidentes similares.