Magdalena Rodríguez Dehli, que conozco desde su Primaria, fue subcampeona en el Concurso Hispanoamericano de Ortografía; ella fue alumna ejemplar en un Colegio de La Ería ejemplar, bajo la dirección de Eduardo Fuente del Río, y es alumna brillante en el Instituto de La Ería, antes dirigido por Amador Fernández, ya jubilado, hoy por Juan Raúl Yebra Varela. Magda, además de buena compañera, es una guapa de buen carácter, sonrisa fácil y contagiosas iniciativas mil. La palabra «abigeato» la apeó del primer lugar en el certamen organizado en México, quizá porque acá no solemos robar ganado, pero término común en los rotativos mexicanos. Nosotros, por influencias del «western», a los ladrones de ganado de cuatro patas llamamos cuatreros. En la isla de San Balandrán, al norte de Peñas, en un torneo de imaginación, preguntaron: «¿Quién fue Avel?»; respondí: «Un hijo de Hadán y Eba». Y gané.
