Los seminaristas de Oviedo piden a los jóvenes quitarse la "venda de los prejuicios" y acercarse a la Iglesia

Las instalaciones de Prao Picón albergan este año a 32 aspirantes a sacerdote, de los que cinco se ordenarán este año como diáconos

Los seminaristas de Oviedo posan junto al Rector, Sergio Martínez.

Los seminaristas de Oviedo posan junto al Rector, Sergio Martínez.

"Quitarse la venda de los prejuicios" y acercarse a la Iglesia. Es la petición lanzada a los jóvenes por Marcos Vidal, un seminarista de 27 años, durante el encuentro con los medios organizado por el Seminario Metropolitano de Oviedo, concidiendo con la festividad de San José, patrón de los aspirantes a sacerdote.

Vidal cursa tercer curso en las instalaciones de Prao Picón y compartió protagonismo con sus compañeros Rafael García, un exvigilante de seguridad de 45 años y alumnos de quinto curso, y Alvar Arroyo, un joven madrileño de 22 años "enamorado de Asturias" y estudiante del primer curso.

En su intervención, Marcos Vidal reivindicó que sacerdotes y seminaristas son "gente normal" y llamó a borrar falsos mitos sobre quienes reciben la llamada de Dios. "Siempre se tiene la percepción de que los curas son raros, que no se relacionan con nadie, o que a los seminaristas se les ha lavado la cabeza", explicó, asegurando que , remarcando que en su caso hace las mismas cosas que "otros jóvenes".

Desde su perspectiva, la Iglesia en Asturias está "muy viva", con jóvenes laicos que tienen "muchísimas inquietudes" y participan de las celebraciones que se convocan. Como ejemplo ha dicho que este lunes han tenido una celebración de Adoración en la Capilla Mayor del Seminario organizada junto al movimiento 'Hakuna' en la que "la media de edad era de 20 años" y asistieron unas 300 personas.

A este respecto el rector del Seminario, Sergio Martínez, que también participó en el acto elevó la reflexión a la falta de jóvenes en general en Asturias, destacando que es la región europea con menor índice de natalidad y de las más envejecidas.

Rafael García, que está en su quinto año, explicó que su objetivo como futuro sacerdote es "mantener viva la llama del Evangelio para que los jóvenes encuentren esperanza en la vida" y tengan "un fin" en este tiempo "tan sombrío". También le mueve el llevar los sacramentos a las personas que, por su edad o por la dispersión no pueden acercarse a las iglesias.

Por su parte, Alvar Arroyo ha indicado que se está formando en el Seminario de Oviedo porque tuvo una "fuerte conversión" en Covadonga hace dos años. Procedente de Madrid, ha asegurado que en el Santuario "encontró la paz". "¿Cómo no devolvérselo a la Virgen de Covadonga viniendo a formarme a la Diócesis de Oviedo?", se ha preguntado.

Cinco ordenaciones diaconales

Actualmente en Asturias entre el Seminario Diocesano (19), el Seminario Misionero Redemptoris Mater (11) y la asociación Lumen Dei (2), hay 32 seminaristas formándose para ser sacerdotes. En el Metropolitano cuatro de los seminaristas pertenecen a Santander, con lo que una vez ordenados regresarán a su diócesis, y otros cinco llegan becados desde Nicaragua y una vez finalicen, también regresarán.

El rector ha explicado que se mantiene el número de vocaciones en Asturias y ha avanzado que está prevista la entrada de tres nuevos seminaristas el próximo curso.

Sergio Martínez ha explicado que este año se celebrarán cinco ordenaciones diaconales el domingo de Pentecostés en la Catedral y ninguna sacerdotal.

Además, coincidiendo con el día de San José, otros dos seminaristas harán el rito de la "Admisión a las sagradas órdenes", en una celebración a las 20.00 horas en el Seminario.