Un Oviedo práctico y efectivo logró su segunda victoria de la temporada en el Carlos Tartiere y se asienta en la zona alta de la clasificación. Los azules, que se adelantaron en el marcador en el minuto 9, optaron por dejar la iniciativa al Alcorcón, que pese a llevar siempre el control el partido sucumbió ante la enorme pegada de los locales, reafirmando la condición de máximo realizador de la categoría

Sergio Egea dio continuidad al equipo que ganó en Valladolid, con el único cambio de Koné por el sancionado Linares. El Oviedo entró bien en el partido y trató de llevar la iniciativa en los primeros compases. Los azules tuvieron una primera ocasión en un disparo flojo de Koné que atrapó sin problemas Dmitrovic, y dos minutos después se iban a adelantar en el marcador en un disparo de Susaeta desde fuera del área que pegó en el poste derecho y Toché aprovechó el rechace para mandar el balón a la red.

A partir de ahí, el Oviedo cedió el control del juego al Alcorcón. Los madrileños tuvieron mayor posesión y jugaron siempre con criterio el balón, pero les faltaba acertar con el último pase. En las contadas ocasiones que lo lograron se encontraron con un Esteban muy acertado. La primera de ellas vino como consecuencia de una mala cesión atrás de Susaeta, en el minuto 29, pero el guardameta asturiano logró tapar el remate de David Rodríguez. La segunda y última fue ya al borde del descanso cuando el portero oviedista desvió un remate a bocajarro de David González, en una clara ocasión de los madrileños.

El Oviedo optó por dejar la iniciativa al rival y defendió con criterio y orden. Le faltó en cambio más acierto en los pases cuando recuperaba el balón. Cometió muchos errores y las pérdidas le impidieron llegar con claridad al área rival. Prueba de ello es que tras el gol de Toché, un disparo de Jonathan Vila que salió por encima del larguero fue su única aportación ofensiva en una primera mitad en la que los azules tuvieron que reajustar sus líneas con la lesión en el minuto 36 de Verdés. Entró al campo Cristian Rivera en la posición de pivote con lo que Jonathan Vila pasó a formar pareja con David Fernández en el centro de la zaga.

La segunda mitad comenzó con una clara ocasión de los locales, en un remate de cabeza de Toché, que salió rozando el poste, tras un buen centro desde la derecha de Susaeta.

Sin embargo, el guión del partido no cambió. El Oviedo seguía dejando la iniciativa del juego al Alcorcón, esperando su oportunidad en las salidas a la contra. La diferencia con respecto a la primera mitad era que el Oviedo estaba llegando con más claridad. Así Toché avisó con un remate, tras un centro desde la izquierda de Hervías, que Dmitrovic desvió con acierto, pero a la jugada siguiente el delantero murciano envió a la red un buen centro de Koné. El Oviedo tenía el partido dónde quería y Egea optó por dar entrada a Héctor Font por Toché para tener un mayor control del juego. Los madrileños lograron acortar distancias al rematar Fernando Román una falta lateral, en el minuto 73, y se volvieron a meter de nuevo en el partido hasta el punto que sólo dos minutos después el propio Fernando Román iba a estrellar el balón en el larguero tras un rechace en el lanzamiento de un saque de esquina.

El Oviedo se rehizo y además asestó el golpe definitivo en un centro desde la derecha de Susaeta que Cristian Rivera enganchó con fuerza y a botepronto para establecer el 3-1. El Alcorcón no se rindió y siguió intentando recortar distancias, lo que logró por medio de David Rodríguez ya en los minutos de prolongación y en un acción de fuera de juego para cerrar un partido que decidió la enorme pegada del Oviedo.