A pesar de que el Oviedo no atraviesa el mejor momento de la temporada, tres partidos sin conocer la victoria, siempre se puede sacar alguna conclusión positiva. Ahora, por ejemplo, el sistema de Egea logra contener mejor las acometidas de los rivales. En los dos últimos choques, los azules solo han recibido un tanto, el que hizo Álex Alegría en el tramo final del choque en Los Pajaritos. La contraprestación es que el equipo ha perdido fluidez en ataque, con ningún gol en los últimos dos choques. Pero el vestuario trata de quedarse con la lectura más amable. El vaso medio lleno. David Fernández apunta una de las claves en la mejora de los resultados: "Debemos controlar más los partidos en los momentos difíciles".

El Oviedo ha logrado cerrar filas en torno a su área en los dos últimos choques. El despiste a cinco minutos del final de Borja Gómez impidió encadenar dos partidos sin recibir gol. David Fernández es uno de los protagonistas en el inicio liguero. Indiscutible en los planes de Egea, el zaguero está mostrando un nivel similar al de la temporada pasada, cuando completó una campaña sensacional haciendo pareja en el centro junto a Jonathan Vila. Ahora, también desde el terreno de juego, analiza cómo marchan las cosas para los azules. "El objetivo es buscar el equilibrio. Queremos controlar los partidos y ser fuertes en defensa. Y cuando toque ir al ataque, debemos ir con todas nuestras armas", señala el zaguero.

Y las armas del Oviedo son, en opinión de la mayoría de analistas, una delantera de un nivel máximo para la categoría. "Queremos estar atrás lo menos posible y cuando juegas con dos puntas es inevitable jugar más directo. En los últimos partidos no hemos estado acertados pero hemos creado ocasiones aunque sin marcar", analiza David Fernández. "Buscamos estar seguros en defensa y aprovechar las ocasiones arriba", añade.

El modelo a seguir no es tan lejano. El año pasado, el Oviedo también entró en la competición con dudas en la defensa. Era, en esos comienzos, la única fuente de preocupación en el sistema de Egea. David Fernández insta a repetir conducta: "En las primeras jornadas de la temporada pasada, hasta que alcanzamos la mejor versión, encajamos goles. El grupo va a ir encontrándose cada vez mejor, estoy convencido".

La situación de la tabla es otra de las razones que invitan al optimismo. Esta temporada no parece haber un conjunto dominador en Segunda. La igualdad es la tónica habitual. El Córdoba, líder, cayó en la última jornada ante el Albacete, igualado a puntos (16) con el Oviedo. Entre el sexto, en play-off, y el cuarto por la cola, en descenso, tan solo hay cinco puntos de distancia cuando ya se han completado 12 jornadas ligueras.

La igualdad permite que con una racha positiva cualquier equipo mejore sustancialmente su posición en la tabla. "La categoría es de las más igualadas que recuerdo en los últimos años. Todo está muy ajustado. Ganando un par de partidos te metes arriba, ojalá sea el caso del Oviedo", desea David Fernández.