Borja Domínguez lleva poco más de dos semanas en Oviedo, suficiente para convencer a Hierro y dominar el mensaje alrededor del club. El centrocampista gallego, que apunta a repetir titularidad el domingo ante el Getafe (18.00 horas), apeló ayer al Tartiere y al oviedismo para ganar el partido. "Tener a la afición de nuestra parte y que venga gente al campo es importantísimo" porque "tenemos que hacer un campo muy fuerte para que los equipos vengan con miedo". El club lanzó una campaña con entradas a diez euros que finaliza hoy con el objetivo de potenciar la afluencia de oviedistas.

El jugador azul, que reconoció haberse sentido "a gusto" y "cómodo" en el equipo titular en Anduva, admitió que el duelo frente al Getafe será "complicado" porque el rival es "duro" y está "bien trabajado" con Bordalás, pero negó que se tomara como una "final" e instó a pensar "partido a partido" porque "queda mucho".