Luismi tiene en la peña que hay con su nombre una buena excusa para seguir viniendo a Oviedo de vez en cuando. "Es un orgullo tener una peña del Oviedo en mi honor, y que la sigan manteniendo después de tanto tiempo es increíble", explica el gallego.

El que fuera central del Oviedo reconoce que "es una forma de seguir en contacto con la gente, voy a comidas de la peña y siempre que puedo me acerco". Y es que la gente todavía le agradece su presencia en aquellos tiempos duros cuando se pasa por la ciudad. Ahora, con el equipo en Segunda, empuja como uno más: "Ojalá que aguanten con la fuerza que están demostrando ahora y suban a Primera". Él reconoce que, "aunque sea un poquito, un trocito aunque sea pequeño, será nuestro y nos veremos reflejados cuando asciendan".