A Nahuel Valentini le ha tocado jugar un papel complicado en lo que va de temporada. Sus dos titularidades han coincidido con dos choques que han dolido, el 2-3 ante el Rayo y el 2-0 de Granada. Futbolista con kilómetros y competitividad demostrada en una liga como la italiana, ahora afronta el reto de mejorar su rendimiento al mismo ritmo que crece el equipo. "La única forma que conozco para mejorar es trabajar", señala como si se tratara de un lema personal. Y añade: "Hay que afrontar las cosas con tranquilidad: tener la cabeza fría y el corazón caliente".
Valentini atiende a los medios tras una sesión a la que precedió una reunión en el vestuario. Fue allí donde Anquela transmitió a los suyos lo que quiere ver a partir del domingo. "El míster siempre transmite su opinión y tratamos de captar lo que quiere. Estuvimos hablando con él y somos realistas: hay varias cosas que mejorar. Pero también vemos la realidad, que el equipo siempre pelea. Hasta el minuto 95 no bajamos los brazos en Granada: luchamos y tuvimos oportunidades. Perdimos pero dimos la imagen de un equipo que se entrega al máximo", indica el central que insta a centrarse en el Córdoba: "Hay que pasar página y pensar en el siguiente partido. Estamos en casa, debemos ir a buscar el partido y ganar. Esperemos que las pequeñas cosas se den a nuestro favor".
En esa búsqueda de la victoria hay un aspecto en el que siempre suele insistir Anquela: la necesidad de dejar la portería a cero más habitualmente. "Trabajamos para ello, para no recibir. Tenemos un grupo nuevo, sé que no es excusa, pero a veces con tantos futbolistas fichados se necesita un tiempo para que las cosas funciones perfectamente", analiza el argentino.
