Después de 46 años empleado en cuerpo y alma a su bar en Tazones, bien podía pensar a sus 73 años en descansar y disfrutar con calma de su Oviedo. Pero José Jesús Varas Gallego sentía que tenía una cuenta pendiente con su pueblo, y que los colores azules aún tenían que estar más presentes en Tazones y el concejo de Villaviciosa en general. Por eso no lo dudo y decidió formar una peña azul, que ya tiene 43 socios, y que hoy será presentada formalmente durante una fiesta.

"Desde unos cinco años ya hay una peña del Sporting aquí, y está bien que ahora tengamos una azul y exista un poco de piquilla", destaca Varas, que es socio del Oviedo de forma ininterrumpida desde 1988, aunque desde la década de los sesenta del pasado siglo lleva acudiendo de forma intermitente, siempre que se lo permitía el trabajo, a ver partidos del conjunto azul. "Este año vamos a subir. Sería la mejor alegría para celebrar nuestro nacimiento", destaca el fundador de la peña azul de Tazones junto a Julio Cañón (vicepresidente), a José Fernández Cuervo (tesorero) y José Manuel Fonseca (secretario).

En su vida vinculada al Oviedo ha vivido muchos momentos alegres, pero también algunos tristes. De los primeros, su mejor recuerdo es un viaje en los noventa, aunque tuvo sensación agridulce. "Fui de los que pudieron viajar a Génova a ver al equipo jugar la Copa de la UEFA. La experiencia fue muy buena, pero llevé un disgusto con el resultado final", explica, mientras recuerda que los mejores partidos los disfrutó en el viejo Tartiere: "Había un ambiente especial, buenos equipos, ganamos al Barça y al Madrid, y tuvimos buenos años en Primera".

Aunque en estos 73 años, José Jesús Varas Gallego tuvo que pasar el mal trago de ver jugar a su Oviedo en Segunda B y Tercera. "Me dio mucha pena tener que verle jugar en Villaviciosa. Fueron años difíciles, en los que no dejé de ser socio, pero no fui a muchos partidos", relata. Pero también añade que su pasión por el conjunto azul no ha disminuido en este tiempo y también su familia ha adoptado ese sentimiento. "Mis dos hijos van a veces al fútbol, pero mis tres nietos, Javier, Pablo y Miguel, son socios del Oviedo desde nada más nacer". El oviedismo tiene ahora su rincón en Tazones, un lugar para poder disfrutar de los partidos del equipo, para recibir a futbolistas y ex del conjunto azul, y para poder organizarse para realizar viajes. "Queremos ir este año a León o a Lugo", cuenta Varas que ayer, junto al tesorero Cuervo, ultimaban los preparativos de la fundación de este colectivo, que hoy se vestirá de largo.

"Me gustaban mucho Jerkan, Viti, Carlos o Zubeldia, éste último incluso vino a verme como viajante para venderme licores al bar", recuerda José Jesús Varas, un veterano oviedista al que le hizo mucha ilusión la expansión global de accionistas del club, pero que quería que "no se perdiese el arraigo del club en la región". Hoy celebrará junto a muchos oviedistas la puesta de largo de la última peña azul.