Gijón lleva más de una semana teñida de rojo y blanco como conjura para esta tarde el Sporting certifique su permanencia en la máxima categoría del fútbol español. Comercios de todo tipo, hoteles, panaderías, pizzerías, administraciones de lotería, restaurantes y, por supuesto, los chigres han tuneado su decoración habitual por los colores rojiblancos porque la victoria es cosa de todas. La ciudad entera está llamada a apoyar a su equipo y a escanciar un culín a su salud.
"Por afición, por equipo y por los guajes. Fuimos, somos y seremos siempre de primera. A por ellos". Este es el lema que entonan los trabajadores y clientes habituales del restaurante La Nueva Bellota, que prácticamente han convertido el establecimiento en un museo sportinguista. Más de una treintena de globos adornan el comedor, tiras de plásticos con flecos rojos y flancos delimitan el acceso al comedor y ocho variopintas bufandas del Sporting adornan la barra desde antes de visitar Getafe. Por no hablar de las tres banderas ad hoc, camisetas y cuadros y pósters de jugadores sportinguistas de ayer, hoy y siempre.
Todo ello es obra del equipo de camareros y cocina, capitaneados por Armando García, que han engalanado cada rincón con permiso y complacencia de la dueña Carmen María García que junto a su nieto Martín en brazos, presume junto a sus fieles de la decoración. "Por supuesto que nos vamos a salvar, no hay duda", espeta tranquila Carmen María. "Hay que integrarse, ha tenido mucha aceptación cómo está engalanado. Es lo que hay que hacer para lograr el triunfo", señala Armando García.
La conjura además de por el sentimiento de la hostelería viene acompañado por la fuente de ingresos adicionales que supone tener al equipo en primera. "En Segunda División no viaja nadie con su equipo, a lo sumo dos punteros pero nada más", valora José Riestra con la elástica enfundada en Casa Fede donde, de cada ventana, cuelga una camiseta del Sporting. "Que el equipo esté en primera es positivo pero no sólo es bueno para la hostelería, beneficia a todo el comercio de la ciudad porque nos visitan aficiones consolidadas como el Atlético de Madrid, la Real Sociedad o el Athletic de Bilbao", apunta. Pero según los hosteleros también supone un incentivo a los propios ciudadanos de Gijón que "se involucran mucho más en primera, viendo los partidos por la televisión que juega el Sporting fuera de casa".
Una opinión, la de José Riestra, que comparte José Manuel García Busto en la Sidrería Plaza Mayor. Un establecimiento donde no hay un solo rincón que no vista de rojiblanco. Quini ocupa un lugar prominente junto a fotos de la plantilla con los onces titulares que repasan la historia del más que centenario club gijonés. "Salvarse es positivo al cien por cien, se nota mucho cada temporada que estamos en primera", sentencia García Busto que no concibe otro resultado que no sea la victoria conjunta del Sporting y del Betis.
Un escenario similar ocurre en la sidrería la Casona Jovellanos donde dos banderas del Sporting ondeando al viento custodian la entrada del negocio regentado por María Luisa Acera y David Vega. "Si el Sporting está en primera la plaza se llena, si está en segunda la tengo vacía", confirma enérgica María Luisa que tiene largo metraje tras la barra. Fruto del bagaje en La Casona ha compartido confidencias con muchos turistas de toda España. "Todas las aficiones que han pasado por aquí se sorprenden con la Mareona y los turistas preguntan por el Sporting porque tienen un comportamiento ejemplar en cada desplazamiento y la mayoría desean que nos vaya bien, que podamos continuar un año más en Primera", desvela David Vega.
Para el conjunto de los chigreros de la ciudad no cabe la opción a la derrota esta tarde. Sólo piensan en ganar. No obstante, pase lo que pase, se sentirán orgullosos de los guajes y brindarán con unos culinos de sidra por la temporada cosechada por el Sporting que ha devuelto a Gijón, al menos, a la Primera División.
