El Sporting afronta un mes de enero en el que disputará tres de sus cuatro compromisos ligueros lejos de El Molinón. Los rojiblancos sólo se medirán en casa al Eibar, mientras que rendirán visita a Unión Deportiva Las Palmas, Betis y Athletic de Bilbao. El conjunto gijonés aspira a retomar el pulso de la competición este sábado en Gran Canaria con fuerzas renovadas para iniciar un tramo de la temporada en el que suele de ir de menos a más. Once años lleva sin vencer en el primer partido del año, sin embargo, el mejor ejemplo se encuentra en la pasada campaña, en la que logró enlazar dos victorias en el primer mes del calendario que le permitieron despedir la cuesta de enero fuera de los puestos de descenso.

El Sporting está a tres partidos de cerrar la primera vuelta, mismos puntos que le separan de alcanzar la cifra lograda en el ecuador de la Liga durante la pasada campaña. Enero se convierte en el nuevo plazo para la reválida rojiblanca tras un final de año en el que el equipo no acabó de reaccionar para disfrutar de las vacaciones fuera del descenso. Si en esta ocasión esperan cuatro encuentros, el calendario de la temporada pasada amplió a cinco los compromisos. Los dos últimos, ante Real Sociedad y Valencia, terminaron con victorias, sacaron a los gijoneses del descenso, y reforzaron la fe para alcanzar la salvación. El equipo aspira ahora a repetir experiencia.

A quien se le complica poder participar en el primer partido de Liga del año es a Lillo. El alicantino se ejercitó junto al fisioterapeuta para continuar con la recuperación del esguince sufrido en su rodilla izquierda. Las sensaciones del jugador, que el lunes tuvo que retirarse a la mitad del entrenamiento, no parecen ser las mejores. En todo caso, el club le etiqueta como "pendiente de evolución" y su participación ante el cuadro canario no está todavía descartada. Meré tampoco se entrenó ayer con el grupo, sin embargo, la presencia del ovetense se da por segura ante el cuadro dirigido por Quique Setién. El Pitu cuenta con las bajas seguras de los lesionados Lora, Ndi y Castro, y el sancionado Amorebieta.

Las ausencias en el entrenamiento llevaron a que el técnico rojiblanco volviera a echar mano del filial para completar el entrenamiento. A la participación habitual del central Juan Rodríguez y el delantero Rubén, se añadió la de Ricky, lateral derecho; Pelayo Suárez, central, y Cristian Salvador, centrocampista, que ya participaron en los días previos a la vuelta de Copa. El Pitu dirige hoy un nuevo ensayo a puerta cerrada en Mareo.