"Tenemos muchas ganas de que llegue el partido y de poder jugar ante nuestra afición". Diego Mariño vive una ilusión ante nueva etapa en el Sporting, tras la salida de Cuéllar, el gallego se asienta como portero titular y ha comenzado mantienendo su portería a cero en Alcorcón gracias a una gran intervención suya en la ocasión más clara de los locales. El guardameta destaca la importancia de la seguridad defensiva en el proyecto rojiblanco: "Atrás estamos bastante bien, con las cosas claras y éste es un buen principio para construir".

El partido de El Molinón y la puesta en escena ante su afición tiene ilusionado a Mariño y al resto de la plantilla. "Queremos dar una buena imagen en casa, porque el ascenso pasa por hacer un fortín de El Molinón y que nadie se lleve los puntos", argumenta el portero gallego, que reconoce que "la cifra de socios me ha sorprendido y cómo están con el equipo".

Mariño analiza el nuevo proyecto rojiblanco y concluye que "tenemos mimbres para para hacer grandes cosas". El guardameta admite que este verano "se ha producido un lavado de cara, ha venido gente nueva, con ilusiones renovadas y un nuevo objetivo". El gallego insiste en que "se han hecho las cosas bien, hay un gran equipo y muy compensado".

El primer equipo en visitar El Molinón será el Lugo, del que Mariño maneja la referencia de que "es un equipo de atreverse, de jugar abiertos y de jugar al fútbol". El portero reconoce que el hándicap del Sporting está siendo la creación de juego, aunque matiza que "arriba tenemos gente de calidad, pero tenemos que dar un pasito más en ese aspecto".

En el plano personal, Mariño reconoce que "todos queremos jugar" y se confiesa "contento por la confianza del entrenador y con ganas de aportar cosas al equipo".