"Estamos fastidiados por el resultado, pero orgullosos del trabajo". Sergio lamenta que el Sporting no haya podido irse de Zaragoza con al menos un punto, después de un partido en el que dos errores les penalizaron en exceso. "Cuando nos marcan el 2-0 es un jarro de agua fría", resalta ante de añadir que "en el descanso hemos dicho en el vestuario que teníamos que salir a por el partido".

La Mareona animó a los suyos, pero no se pudo llevar la alegría del triunfo. "Es un orgullo que nos acompañen tantos aficionados", indica Sergio, que lanza un mensaje de optimismo de cara a las últimas cuatro jornadas: "No vamos a bajar los brazos. Queremos que llegue ya el sábado. Nos centramos en nuestro trabajo. Queremos lograr la máxima puntuación".