Luarca,

A. M. SERRANO

Un fotógrafo resultó ayer herido de gravedad durante la celebración de una competición automovilística en el municipio de Valdés, el Rallysprint «Villa de Luarca». Pablo Portilla González, vecino de Oviedo, se encontraba en una zona autorizada para realizar su trabajo, en el cruce de la localidad valdesana de La Artosa, cuando se le vino encima una señal de stop, que a su vez fue derribada por uno de los vehículos de la competición, que se encontraba en plena prueba.

Según relataron testigos del suceso a LA NUEVA ESPAÑA, el accidente del que fue víctima el fotógrafo fue resultado de un cúmulo fatal de casualidades. Al parecer, el coche se salió de la vía en una curva pronunciada, colisionó contra una valla de seguridad y ésta impactó contra la señal, derribándola. La señal golpeó al fotógrafo y le hizo caer de cabeza por un desnivel de medio metro. Miembros del equipo de voluntarios de Protección Civil de Valdés fueron los primeros en dar la voz de alarma y llamar al servicio de emergencias 112.

El accidente en el que resultó herido el fotógrafo ovetense se produjo pasadas las doce del mediodía. Un voluntario de Protección Civil de Valdés, enfermero de profesión, se encargó de valorar en un primer momento las lesiones del herido. Tras la primera observación, se decidió solicitar un helicóptero medicalizado, para evacuar al joven, que finalmente fue trasladado al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). Según el médico rescatador, Pablo Portillo presentaba un traumatismo craneoencefálico. Su pronóstico es reservado.

La organización de la competición automovilística decidió continuar con la prueba deportiva, la primera de estas características que se celebra en el municipio de Valdés.

Hasta el lugar del accidente se trasladó la ambulancia de soporte vital básico del centro de salud de Luarca, además del médico de la organización de la prueba deportiva. El equipo de Bomberos de Asturias dio por finalizada la intervención a las dos menos diez de la tarde. También se informó del suceso a la Guardia Civil.

Los hechos

Zona autorizada

El fotógrafo Pablo Portilla se encontraba realizando fotos de la competición automovilística en una zona autorizada por la organización.

Fatal casualidad

Uno de los vehículos de la prueba se salió en una curva y desplazó una valla. La valla impactó contra una señal y la derribó. La señal terminó golpeando al fotógrafo, que cayó de cabeza por un desnivel.