Los números pueden cambiar nuestras percepciones de la realidad. Seguro que tienen la certeza de que el tiempo, en el mes de julio, fue malo, desapacible, con pocos días de sol, con lluvia y temperaturas frescas. Pues están muy equivocados. Los datos de la Agencia Estatal de Meteorología desmienten sus sensaciones. Julio fue, meteorológicamente, un mes de verano inusualmente seco. Se recogieron la mitad de los litros de lluvia que suelen ser habituales. Conclusión, para los hombres del tiempo fue cálido y extremadamente seco. Cierto que la ola de calor de los primeros días del mes batió récords de temperaturas, pero después vimos a "Lorenzo" por las ranuras de las nubes. Ahora vaticinan que agosto va a ser inestable. Es para echarse a temblar: si julio fue bueno, cómo será la inestabilidad de este mes. Confiemos que no se cumpla el dicho de que el primer día de agosto es el primer día de invierno.