Por fin dejó de llover, salió el sol y hoy las terrazas de Mieres revientan de gente deseosa de secarse por fuera y humedecer el interior. La calle, de principio a fin, es una sucesión de bares con sus terrazas anexas. Carcajadas, gestos relajadas, despreocupación general. No sabemos cuánto aguantará la primavera. Carpe diem.

Por los laterales de la calle he visto pasar un par de espectros, vecinos a los que creía muertos, cadáveres de andar presuroso que han logrado escapar de sus tumbas. Ya me habían avisado: la heroína ha vuelto. El "pico", que se llevó por delante casi una generación entera, está de nuevo en la calle. El ser humano es capaz de tropezar en la misma piedra infinidad de veces. El ritmo de los tiempos boyantes se mantiene a base de cocaína, que es más pija, más de ejecutivos y especuladores. Sin embargo, cuando circula el "caballo", señal de que el panorama está chungo. Y el desmantelamiento industrial de Mieres y la heroína fueron de la mano.

Hoy vive plácidamente "aterrazada" mientras el veneno se vuelve a colar por la puerta de atrás. Ya percibo el motivo de esas prisas: un coche patera los espera. Un paseo, un pinchazo, un viaje, un paso más hacia la muerte. Al otro lado, la felicidad que trajo el primer calor, el jolgorio, el saludo, el chismorreo. Despierta, Mieres, que están volviendo las jeringuillas callejeras mientras te distraes observando la vida pasar tras un vaso de vino. Los traficantes están tomando posiciones. Porque hay clientela. Como la hubo en los años 80. Aquélla que se quedó por el camino.

Cuidado, Mieres, que el demonio ya está aquí dispuesto a llevarse a los espíritus más débiles. No volvamos a cometer el inmenso error de creer que "esto no va conmigo". Los funerales de hace un cuarto de siglo demostraron que esto va con todos, que nadie es invulnerable, que no hay familia inmunizada contra ese veneno devastador.

Vigila, Mieres, para que no se vuelva a repetir. No nos podríamos permitir otra generación arrasada. Disfruta, Mieres "aterrazada", de tu primavera, pero no dejes de estar alerta.