«Hoy Drácula tiene competencia chupóptera en los bancos»

Susana GOLF

Alfonso Azpiri (Madrid, 1947) y Antonio Fraguas «Forges» (Madrid, 1942) fusionan sus diferentes estilos, el humor y el terror y el pasado y la actualidad en «Drácula» (Ediciones B), una novela gráfica, primera entrega de «Horreibols and Terrifics Books».

-Drácula, un señor que chupa la sangre a los demás..., ¿a quién me recuerda?

-Forges: Hay una famosa leyenda egipcia de la II Dinastía, un dios que se alimentaba de sangre. Los monstruos van cambiando hasta nuestros días, y hoy Drácula puede ser un señor que trabaja, pongamos por caso, en una agencia de calificación de riesgos o en el FMI.

-Pero Drácula fue real y además era conde. Hoy en día ya sabe usted que le das a alguien un título...

-Forges: Y te escribe un libro. Lo de conde es peligroso, y lo de duque, más. Barbazul era marqués.

-¿Dibujar a cuatro manos es muy complicado?

-Azpiri: A cuatro manos y cuatro pies, que llevamos una marcha... Nos costó un poco al principio porque son dos estilos diferentes. Yo hacía los fondos, el guión y la historia y luego encajamos los dibujos de Forges. Pensé primero en hacerlo todo en color, pero luego me gustó el contraste en blanco y negro. Hoy con los ordenadores todo es más cómodo.

-¿Así que no matará el ordenador al lápiz y el papel?

-Azpiri: Para nada. Los ordenadores no dibujan solos. El libro de Drácula ha salido en digital y es una maravilla, parece hecho para la tableta.

-Son fieles al original de Bram Stoker pero con mucha crítica social actual.

-Azpiri: Sí, hablamos de monstruos clásicos, pero también pensamos en «El fantasma del Congreso de los Diputados» o en nuevos personajes de terror, como el inspector de Hacienda. Hoy Drácula tiene competencia chupóptera en los bancos.

-¿Hay algún tabú en el humor gráfico?

-Forges: Hay quien es más papista que el Papa. Y curiosamente cuando hay escándalos de corrupción o de la banca, surgen otras cosas menores... o la dación en pago de las hipotecas, ¿por qué no se habla de eso?

-¿La viñeta es, como las plazas, un reducto de la indignación?

-Forges: Las viñetas son en realidad pequeñas plazas, somos portavoces de la gente que mira, si no con indignación, sí con cierto sarcasmo determinados comportamientos.