La presidenta argentina, Cristina Fernández, en la imagen, abandonó ayer el hospital y regresó a su residencia oficial de Buenos Aires con inmejorables noticias, tras sufrir una operación de tiroides por un diagnóstico de cáncer que finalmente fue descartado. Cristina Fernández fue ingresada el miércoles en el prestigioso hospital Austral de la provincia de Buenos Aires para someterse a una tiroidectomía por un carcinoma detectado en el lóbulo derecho.