Denzel Washington, protagonista de películas como «Malcolm X», «Philadelphia», «El informe Pelícano» o «American gangster», protagoniza «El invitado», una cinta de acción trepidante donde sale a flote el juego sucio de la CIA. El actor está de promoción en España junto a su compañero de reparto, Ryan Reynolds.
«Soy un tipo ordinario con un trabajo extraordinario», afirma el actor, que en esta cinta interpreta a Tobin Frost, un prófugo, ex colaborador de la CIA, que es detenido y trasladado a Ciudad del Cabo para ser interrogado por un joven agente (Ryan Reynolds) encargado de vigilar el pequeño piso franco que la CIA tiene en Sudáfrica.
«Mi personaje es un psicópata, es ateo, manipulador y mentiroso. Además, piensa que el mundo se ha equivocado y que él siempre tiene la razón», señala Washington, quien asegura que elige los guiones en función de la «variedad» de los personajes que tenga que interpretar, sin olvidar las películas «entretenidas», porque «las películas serias no las ve nadie», alega.
Después de haber interpretado a Malcolm X, a Huracán Carter o a Steve Biko, parecía lógico que Denzel Washington interpretara a Barack Obama en el cine, pero el actor desmiente: «Son sólo rumores. No voy a interpretar a Obama. Todavía tiene que vivir, la película no está terminada».
Washington asegura que colaboró junto al director, Daniel Espinosa, en el guión de «El invitado», para «profundizar en algunos personajes», y reconoce que aceptó el guión del director chileno como «homenaje» a su agente, empeñado en que hiciera el filme, y quien desafortunadamente, tras 30 años de trabajo juntos, falleció antes de que Washington hubiera dado una respuesta.
Para el actor, «El invitado» contiene «brutalidad, honestidad» y «zonas oscuras» en todos los personajes y en muchas de las situaciones que se desarrollan en esta cinta, que pretende reflejar el inhumano trabajo de los agentes de la CIA.
«No hice la película porque quería rebelar lo malos que eran los agentes de la CIA y el FBI, no soy tan ingenuo», alega el actor, quien reconoce que estas organizaciones siempre tendrán zonas «sombrías» y agentes encargados de hacer el «trabajo sucio», y que la gente normal prefiere ignorar. En este sentido, Ryan Reynolds, quien interpreta a Matt Weston, un joven oficial de la CIA encargado de la rutinaria tarea de vigilar un piso franco en la exótica Sudáfrica, alega que todos los gobiernos «son negocio y dan miedo», ya que tienen en su poder una gran cantidad de datos de todos los ciudadanos. Reynolds interpreta en el filme a un joven ingenuo y con ideales que cree en el trabajo de la organización. «Me gustó el guión porque no era una historia de espías muy glamourosa», afirma Reynolds, para quien Espinosa refleja la «hipocresía» de la CIA porque no es americano.
