Nueve cuadros de Warhol, entre ellos el que se ve en la fotografía, titulado "Águila calva", fueron robados en una empresa cinematográfica de Los Ángeles y sustituidos por copias, cambio que los propietarios de las obras tardaron años en descubrir. Valorados en unos 300.000 euros, pertenecen a la serie "Especies en peligro de extinción".