La representante española en Eurovisión 2016, Barei, declaró hoy, en la víspera de la gran final de mañana en el Globen Arena de Estocolmo, que participar en el festival que esta noche se celebra es una ocasión única y que no la va a desperdiciar. "Ésta es la oportunidad más grande que he tenido y la voy a agarrar con las dos manos", afirmó la cantante en la rueda de prensa en la que comparecieron por separado los representantes del denominado "Big Five" (Francia, España, Italia, Alemania y Reino Unido), los únicos que pasan directos a la final.

Bárbara Reyzábal (Madrid, 1982), nombre real de la cantante, admitió estar "cansada" después de una intensa semana de ensayos y promoción, pero se mostró convencida de que dará lo mejor de sí. La comparecencia de Barei, que hoy cantará en inglés el tema funky "Say yay!", se produjo minutos después de haber actuado en el primer ensayo general, donde mantuvo las líneas generales de la coreografía, con algún cambio en la iluminación, aunque todavía podrá introducir modificaciones en la prueba final de esta noche, la que servirá de base para la votación del jurado. "No he visto el ensayo, aún no, lo voy a ver ahora, después de que acabe aquí. Creo que algo hay diferente, no sé qué partes. Pero lo deseo y confío en ellos (la televisión sueca)", admitió Barei, que había mostrado su intranquilidad estos días porque la organización no había seguido las pautas de luz indicadas.

Barei reiteró no obstante que su número es "muy simple" debido al mensaje de superación que transmite. "Sólo quiero aparecer con fuerza, llena de energía, que el mensaje cale, transmitir la fuerza motivadora. Es lo más importante", dijo la cantante madrileña.

El sorteo celebrado en la madrugada del viernes situó a España en el decimonoveno lugar en el orden de actuación, entre Rusia, la gran favorita, y Letonia, aunque no cree que eso sea algo perjudicial. "Esta mañana pensaba que iba a ser negativo para mí. Pero después de reflexionar... He hablado con Sergey (Lazarev, el representante ruso) y me dijo: 'Somos muy diferentes, eso es bueno para los dos'. La verdad es que me da igual", afirmó.