La multinacional estadounidense del entretenimiento Walt Disney inauguró en China su primer parque temático, el Complejo Disney de Shanghai, catorce años después de empezar a acercarse a este inmenso mercado, donde ahora el gigante inmobiliario local Wanda le ha declarado la guerra. Disney, que tendrá en Shanghai el más pequeño de todos sus parques -pero a la vez el más adaptado a la cultura local, y el que presume de tener su castillo más alto-, deseaba desde 2002 entrar en el prometedor mercado chino y convertirse en una referencia turística en el país más poblado del mundo.

El recinto fue inaugurado a los pies del castillo, por el viceprimer ministro chino, Wang Yang, y el presidente ejecutivo de Disney, Bob Iger, tras varios días de festejos en torno al parque y bajo una fina lluvia que, como recordó el primero, en la cultura china en un día inaugural augura "buena fortuna".