El actor Paco León llegó a "¡Cómo está Madriz!" porque su carisma encajaba perfectamente en la idea del director, Miguel del Arco. El actor contó que lo llamó Del Arco y que es alguien al que no se le dice que no. Le explicó que iba a hacer una zarzuela diferente y que necesitaba un actor "de empatía y simpatía".

Evidentemente, el actor no tuvo muchas dudas y se dijo a sí mismo: "Veneno que tú me dieras, veneno que tomara yo". Y añadió: "Eso sí, cuando vi el libreto me dije: '¿Esto qué es?'. Pero al final este marrón ha sido una de mis mejores experiencias teatrales. Estoy 'agradecida y emocionada'". Tuvo otro golpe de humor, muy de los suyos, cuando Rivi muy solemne invitó a todos los de la compañía a la noche de San Juan en la plaza de la Catedral para que disfrutaran y quemaran todo lo que quisieran, a lo que Paco León dijo por lo bajinis: "Menos la Iglesia". Fue un golpe de humor más al divertidísimo tono que tuvo la rueda de prensa celebrada en el salón de té del teatro Campoamor de Oviedo y en la que todo el equipo estuvo amable, participativo y regalando grandes elogios a Oviedo por su prestigio dentro de la lírica y al propio teatro Campoamor.

Y así lo manifestaron todos los que dieron voz a la obra en la rueda de prensa, desde el director musical, José María Moreno, que destacó el trabajo de la Orquesta Oviedo Filarmonía y del Coro Capilla Polifónica.

Además, Moreno matizó el sentido musical de la zarzuela y dijo que la parte musical no trata de reflejar la de las dos obras en dos partes, sino que entrelaza números. Ambas obras, dijo, son dos joyas del género chico. Y ensalzó a Chueca como el gran compositor de la "música castiza, del pueblo madrileño. Con Chueca se aprovecharon los números bailables con danzas de todos los géneros", puntualizó.

También participaron en la presentación María Rey-Joly (soprano), Luis Cansino (barítono) y Pedro Moreno (figurinista), además de un buen número de componentes de la compañía que estaban entre el público.