"Señorito", un toro de la ganadería José Escolar, ha sido el protagonista del tercer encierro de los Sanfermines al correr en solitario todo el recorrido, tras quedarse rezagado en la cuesta de Santo Domingo y volverse hacia los corrales. Se han contabilizado dos heridos por asta en la carrera de ayer, sábado, multitudinaria por el fin de semana.
El tercer encierro de los Sanfermines 2016 comenzó a los ocho en punto de la mañana, tras el tradicional cántico al santo "morenico". Fue largo, duró cuatro minutos y un segundo. La carrera se alargó, precisamente, por ese toro rezagado que provocó, como el día anterior otro morlaco, momentos de gran peligro.
La anécdota del día fue protagonizada por el inglés Tim Pinks, galardonado con el 13.º premio "Guiri del año". Un reconocimiento a los extranjeros que "visitan las fiestas de San Fermín y que las viven con pasión", según reza la convocatoria. Pinks es un apasionado de los Sanfermines, a los que acude desde el año 1984. Su última participación activa fue en 1999. A pesar de haber dejado de correr continúa volviendo todos los años. "Tengo más pacharán que sangre en mis venas", declaró Pinks. Además, es autor de dos libros destinados a estas fiestas "Bulleye" ("Los ojos del toro") y " 'Once upon' a time in Pamplona" ("Érase una vez en Pamplona").
Los toros de José Escolar regresaron por segundo año consecutivo a Pamplona después de su debut en 2015. Precisamente el año pasado uno de los ejemplares de esa misma ganadería no realizó la carrera, ya que se dio la vuelta nada más iniciar el encierro y volvió a los corrales. Casi se repite la misma anomalía en esta edición.
Los seis astados salieron junto a los cabestros de los corrales, pero unos segundos después uno de los morlacos se dio la vuelta, mientras sus hermanos seguían hacia adelante. Tras su intento por regresar hacia los corrales, finalmente ha completado el recorrido de la carrera en solitario junto a los cabestros de cola.
Mientras tanto, sus cinco hermanos realizaron una carrera relativamente limpia, aunque ha habido muchas caídas y golpes en Estafeta en un encierro masificado de corredores al coincidir en fin de semana, lo que provocó braceos, golpes e incluso empujones entre los propios mozos.
Los cinco toros corrieron junto a los cabestros todo el recorrido, en ocasiones formando una manada más estirada. Dos de los semovientes tropezaron en la curva de Mercaderes, y un tercer hermano les pasó por encima. No obstante, pudieron completar la carrera con relativa normalidad y entraron a los chiqueros sin problemas.
La mayor emoción la protagonizó el único astado rezagado. Como consecuencia se vivieron escenas de peligro con dos heridos por asta de toro, de pronóstico reservado y menos grave, respectivamente. Al finalizar el tercer encierro de los Sanfermines, un total de 14 personas han sido trasladadas al Complejo Hospitalario de Navarra, de las cuales una de ellas no ha resultado herida en la carrera.
Según han informado en el centro, uno de los heridos por asta de toro, en el tórax, es el japonés W. C. O. de 33 años, cogido en el tramo de Santo Domingo y cuyo pronóstico es reservado. El segundo corneado es I. C. D., de 24 años y vecino de Navarra, quien presenta herida por asta de toro en el brazo derecho de carácter menos grave, sufrida en el tramo de Estafeta.
Además la Policía sancionó a dos corredores. El primero de ellos un norteamericano culpable de portar una cámara mientras corría en el tramo final de Estafeta, donde además fue corneado. El segundo sancionado es un corredor de origen marroquí que corrió agarrando del rabo a un toro, lo que sólo se permite para evitar una cornada.
