La estrella de ayer en el Festival de Venecia fue sin duda Natalie Portman. Allí llegó con su sonrisa tímida para presentar "Jackie", una película de Pablo Larraín en la que interpreta su papel "más peligroso". Y el peligro se le dio bien, ya que la interpretación fue reconocida con el aplauso unánime de la crítica presente en la Mostra. Menos tímido se presentó la víspera el actor Rocco Siffredi, protagonista del documental -dirigido por los franceses Thierry Damaiziere y Alban Teurlain- en el que abre su sexualidad al mundo. Para Natalie Portman, el personaje es arriesgado al tratarse de la ex primera dama, alguien real y muy conocida, que se convirtió en un símbolo y casi un mito por su matrimonio con John Fitzgerald Kennedy. "Es quizás el personaje más peligroso que he interpretado porque todo el mundo sabía cómo hablaba, cómo se movía", expuso la actriz en una rueda de prensa en la que un periodista se le declaró públicamente. Allí, delante de sus compañeros, le confesó que la adoraba desde que la vio por primera vez en "El Profesional. León" (1994).

La confesión de Siffredi, una estrella del porno ya retirada, llega en forma de documental. La película arranca con un primer plano del pene del actor, mientras que de fondo se escucha una de sus reflexiones: "Mi sexualidad es mi demonio". Tanto se desnuda en la pieza -y no sólo literalmente- que confiesa que después del funeral de su madre sintió un impulso sexual al abrazar a una señora de 80 años. En ese momento, se bajó los pantalones y la anciana arrancó a hacerle una felación. "He querido explorar la sexualidad a 360 grados y, por eso, he mantenido sexo con chicas de 18 y con mujeres de 70 u 80", confesó "míster 23 centímetros".