El actor malagueño Antonio Banderas, quien reconoció la pasada semana que sufrió un infarto el 26 de enero, tiene previsto seguir trabajando, pero "a otro ritmo", y aspira a "dar el salto" que anhela desde hace tiempo: ponerse detrás de la cámara y escribir sus guiones. Banderas afirma que se plantea hacer un filme cada uno o dos años y sostiene que se pueden hacer "películas magníficas desde Málaga, desde Madrid, desde Hollywood o desde la Cochinchina, que el mundo ya es global". El intérprete malagueño debutó como director en 1999 con "Crazy in Alabama" protagonizada por su exesposa Melanie Griffith.