El Juzgado n.º 29 de Madrid archiva la causa que vincula al productor Juan Gona con el fraude y compra de entradas. "El procedimiento se incoó por los hechos que resultan de anteriores actuaciones, habiéndose practicado las diligencias de investigación que constan en autos y el informe favorable de la Fiscalía", explica el juez. Que añade: "De lo acordado no parece debidamente justificada la perpetración de delito que ha dado motivo a la formación de la causa, por lo que procede decretar el sobreseimiento de las actuaciones y el archivo de la presente causa".

El productor asturiano nada tenía que ver en este asunto en el que se inflaba la venta para obtener ayudas de la Administración. "Se supone que había un acuerdo entre productores y salas que falseaban los espectadores con la finalidad de llegar a los mínimos exigidos por el ICAA (Ministerio de Cultura) para obtener la subvención", explica el productor asturiano, que recuerda con disgusto verse salpicado por un asunto en el que nada tenía que ver: "Ese lunes brumoso iba camino de León con unos amigos y, ya se sabe, los amigos siempre están a favor. Comentamos que menos mal que no era famoso porque todo el vagón estaría pendiente de mí. Es una sensación extraña porque nunca te imaginas que puedes estar en los titulares de los periódicos, sobre todo gente como yo, que procuro conservar mi anonimato. El daño ya está hecho".

Una vez pasado el disgusto, Gona prosigue con sus proyectos: "Estoy trabajando en uno que rodaremos en marzo en Montevideo y que cuenta con la participación de TVE". Se trata de una historia que transcurre al final de los setenta en Uruguay, en el inicio del golpe militar de Bordaberry. A partir de un grupo de actores que hacen un programa de televisión satírico y crítico contra el Gobierno, se entrelaza una historia de amor entre una prostituta, amiga de estos cómicos, y un coronel torturador y falto de cariño.