El operativo de lucha y control de la avispa asiática durante el año 2020 logro capturar 124.921 ejemplares de vespa velutina en Asturias gracias a las 7.899 trampas instaladas por todo el territorio hasta el 30 de junio, fecha límite para proceder a la campaña de trampeo. Con ello, el Principado consiguió incrementar en un 119% el número de trampas desplegadas en la región y en un 687% el número de capturas de reinas. Durante el trampeo, se realizaron 24.570 revisiones de trampas, con sus correspondientes conteos de insectos así como la renovación de la sustancia atrayente en las trampas que lo necesitaban.

El año pasado se realizó el primer muestreo de capturas con el fin de determinar la incidencia de la avispa asiática. Otra novedad de la campaña de 2020 fue la incorporación al catálogo de métodos de exterminación del uso especial de armas de aire comprimido para proyectar al nido balines impregnados con biocida, una técnica que se suma a las ya vigentes y que es de gran utilidad para los nidos que están a una altura elevada o en lugares de difícil acceso.

La avispa asiática está presente en casi toda la región, aunque hay concejos en los que no se registró ningún nido activo, como en Degaña, Pesoz, San Martín de Oscos y Villanueva de Oscos. En otros, la influencia es menor a 0,5 nidos por cada 10 kilómetros cuadrados, como es el caso de Boal, Grandas de Salime, Ibias, Illano y Santa Eulalia de Oscos. Por contra, el operativo de lucha y control de la avispa asiática constató una alta incidencia en otros concejos como Avilés, Castrillón, Gijón o Noreña, donde registran valores superiores a 40 nidos por cada 10 kilómetros cuadrados de territorio.

La variación interanual constata un incremento general del número de nidos en 2020 con respecto a 2019. Por el contrario, hay 15 municipios en los que se redujo la cifra un promedio del 25%, como son Belmonte de Miranda, Boal, Castropol, Coaña, Llanes, Navia, Peñamellera Alta, Peñamellera Baja, Pravia, Salas, Santo Adriano, Ribadedeva, Tineo, Valdés y Vegadeo.

En lo que respecta a la fase de desarrollo de los nidos, la gran mayoría de los detectados activos fueron primarios o secundarios (un 97%) frente a los embrionarios, que representan apenas un 3%, y que, en este último caso, fueron detectados desde marzo y hasta mediados de julio. La mayoría de los nidos se encuentran sobre árboles y de forma predominante aparecen sobre alisos, castaños, nogales, manzanos, cerezos o eucaliptos.