El Delegado del Gobierno en Asturias, Gabino de Lorenzo, defendió ayer la labor del Ejecutivo en el problema del carbón y también la del ministro José Manuel Soria, duramente criticado por la presidenta del PP en Asturias, Mercedes Fernández, y para quien el PP de Castilla y León ha pedido la dimisión.

"Estamos ante uno de los problemas más serios del Estado español. Las decisiones no dependen del criterio del Gobierno español, sino de las decisiones europeas, que España está obligada a cumplir", indicó De Lorenzo. "Nos gustaría tener garantizado el futuro del carbón, tener una energía eléctrica barata y competitiva, tener una un medio ambiente limpio, que a veces no se consigue quemando combustibles fósiles", opinó.

De Lorenzo cree que, sobre este asunto del carbón y la gestión del Gobierno, "no se puede juzgar tan fácilmente". "El Gobierno, añadió, "no se puede decir que no esté haciendo nada, está trabajando fuerte, sin tregua. Unas veces no hay acuerdo con las empresas mineras, otras no hay acuerdo con las eléctricas, otras no se puede dar lo que se pide". Para De Lorenzo, "a todos nos gustaría seguir produciendo carbón, pero es la producción eléctrica más cara y queremos una energía más barata. No se puede saltar y estarse quieto". El Delegado rompió una lanza en favor de Soria. "Le conozco desde hace muchísimo años, de la época en que era alcalde de Las Palmas, y yo de Oviedo. Me parece un gran político", aseguró, en la segunda jornada del Día de la Seguridad Privada, celebrado en el auditorio de Oviedo.