El otoño astronómico entró ayer a las 16 horas y 21 minutos. Esta estación durará 89 días y 20 horas, dando paso el 21 de diciembre al invierno. Aquí se señalan algunas curiosidades de este nuevo período, caracterizado por menos horas de luz y un cambio en el paisaje.

¿Cómo se produce el equinoccio?

Se origina cuando la Tierra, en su giro alrededor del Sol, se sitúa en una determinada posición. Esta posición es, en la que vemos al Sol situado en el plano del ecuador terrestre, donde alcanza su cenit. Cuando el Sol cruza de norte a sur la línea del Ecuador, los rayos caen en forma perpendicular sobre la Tierra, produciendo que la luz del día tenga la misma duración que la noche. El domingo 30 de octubre habrá que retrasar el reloj una hora.

¿Por qué enfría el tiempo?

Durante el otoño, el polo norte deja de recibir radiación solar y las temperaturas comienzan a descender de forma acusada. En consecuencia, las masas de aire en esas zonas empiezan a enfriarse y a descender hasta latitudes más bajas, poniéndose en contacto con masas de aire más cálidas procedentes del Ecuador.

¿Por qué cambia el paisaje?

Las hojas de los árboles y otras plantas contienen tres pigmentos principales: caroteno, antocianinas y clorofila. Esta última es la que se encarga de absorber la luz del Sol necesaria para la realización de la fotosíntesis y, a su vez, es responsable del color verde. Cuando el otoño empieza, ya no hay tanta luz como en verano y eso implica que la clorofila empiece a decrecer. Los otros colores que se esconden en la hoja -el marrón, el amarillo y el naranja- aparecen paulatinamente.

¿Qué fenómenos se ven?

El 14 de octubre y el 14 de noviembre hay Luna llena. Al atardecer se podrán ver algunos días los planetas Venus, Marte y Saturno, mientras que al amanecer, Júpiter. Es una buena época para ver estrellas, principalmente las Pléyades, Orión y Andrómeda.