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"Lucharemos", advierten las familias de alumnos con necesidades especiales

Los centros afean a Educación la "desorganización tremenda" ante la escasez de docentes, cinco meses después de exponer sus previsiones

Concentración en el patio del colegio El Vallín en Piedras Blancas. MARA VILLAMUZA

El informe de planificación de los centros escolares para atender a menores con necesidades especiales llega, de forma habitual, a la Consejería de Educación en el mes de mayo. Sin embargo, cinco meses después, la Administración regional aún no ha sido capaz de poner orden en este asunto y los colegios han iniciado el curso con escasez de maestros de Pedagogía Terapéutica y Audición y Lenguaje.

Enervadas con esta demora, las familias afectadas anunciaron ayer que lucharán por recuperar lo perdido. Entre tanto, los centros también se encuentran en pie de guerra. "Es vergonzoso que a estas alturas aún no nos hayan dicho cómo resolverlo más que manteniendo las mismas horas que el año pasado", sostiene Miguel Marcos, director del colegio Monte Deva de Gijón. En su caso, el problema se acrecienta este curso, en el que estiman haber incrementado en torno a un 10 por ciento la presencia de alumnado con necesidades especiales. Marcos atribuye a "un descontrol organizativo" que el pasado 1 de octubre no hubieran sido informados acerca de cómo dar respuesta a esta realidad.

"Es injusto que en algo más de un mes desde que empezaron las clases no llegaran los profesores", señala Yasmina González, madre de un alumno autista del colegio El Vallín de Piedras Blancas (Castrillón), un centro que precisamente desde el año pasado cuenta con el programa "Créeme", un aula específica para alumnos con necesidades especiales que "funcionó muy bien". "Nos dicen que los profesores -la de pedagogía terapéutica y la de audición y lenguaje- van a venir, pero todo son palabras y, mientras tanto, el servicio queda sin cubrir", añadió.

La presidenta del Ampa del centro castrillonense, Raquel Calzón, advirtió de la falta de recursos del centro y enfatizó que el colegio se ha quedado este año sin una auxiliar educativa frente a las dos de las que disponía el pasado curso escolar. "Tenemos que seguir luchando hasta que los profesores se incorporen", destacó Calzón, quien como otras familias se manifiesta en la puerta del centro a diario para su reclamación.

El colegio cuenta con 37 niños con necesidades especiales, de los cuales 27 requieren de una persona especialista en pedagogía terapéutica (PT) y seis de ellos son autistas: cinco que forman parte del aula especializada y uno que está en su aula de Infantil. "Actualmente la jefa de estudios, que también es PT, está a media jornada. Está en el aula y está dejando sus labores con los alumnos con trastornos más leves y dejando de prestar terapia al resto de niños, esto no puede seguir así", apuntó Yasmina González.

El director del centro castrillonense, Jorge Monferrer, confía en que los profesionales de pedagogía terapéutica y audición y lenguaje se sumen la próxima semana al centro. "Llevamos un mes sin esos recursos, y todo se debe a un problema administrativo, parece el que tema está subsanado. Los niños con necesidades especiales necesitan un acompañamiento constante y aún tenemos más necesidades, tenemos una auxiliar educativa y necesitamos otra", concluyó Monferrer.

En el Colegio Monte Deva de Gijón aprecian que otro de los efectos de este inicio de curso escasos de personal para atender al alumnado con necesidades especiales ha provocado un efecto 'arrastre' en la organización de otras áreas del centro, no sólo en la faceta educativa. "El personal de nóminas anda loco; otros años ya se incorporaban los docentes el 20 de septiembre y este año no sabíamos nada al comenzar el mes de octubre", sostiene Miguel Marcos. Y agrega: "Hubo tiempo de organizarlo y ahora los niños no están siendo atendidos de forma debida". Aunque han podido atajar el problema con la misma plantilla de la que disponían el curso pasado, reclaman a la Consejería una mayor disposición para poner orden en este asunto.

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