León es una colección de delicias que se puede disfrutar rodeado de siglos de historia. Tampoco se puede olvidar su singular cultura vitivinícola. ¡En León se come, pero también se bebe! En particular, los vinos de la región están amparados por dos Denominaciones de Origen, la D. O. León y la D. O. Bierzo; dos zonas de producción que ofrecen una cuidada selección de vinos para todos los gustos y presupuestos.

Hablamos de una singular colección de sabores que se ha ido moldeando por las idas y venidas del Camino de Santiago, por las cocinas de palacios y monasterios, por una geografía singular que conecta la Meseta con las montañas del noroeste peninsular, por sus ferias y jornadas gastronómicas?, por mil y un matices que han dado lugar a una despensa y un recetario únicos.

Visitar León es disfrutar de una gastronomía en la que confluyen los mejores productos de la tierra, el recetario tradicional, las nuevas vanguardias culinarias y, desde luego, las hábiles manos que día a día se encargan de hacer realidad cada bocado. Comer en León es disfrutar de unas estupendas tapas en cualquier rincón de la ciudad, es compartir un buen vino y es, también, degustar todo el sabor que surge de sus espléndidos fogones.

No debemos olvidar recorrer los tradicionales mercados como el de la plaza Mayor, donde se celebra uno de origen medieval, o el Mercado del Conde, con sus puestos variados mostrando la esencia más arraigada del producto tradicional, con el palacio Conde Luna como espectador de tan insigne despensa.

Pasear por las calles, contemplar las profundas huellas de su historia, tomar un vino, una tapa, rodearse de buena gente? disfrutar de esos momentos que no se olvidan y, al día siguiente, simplemente repetir. Y todo ello en un contexto cultural efervescente, porque León es una de las ciudades de España cuya agenda cultural no para de cautivar a propios y ajenos: conciertos, museos, obras de teatro, festivales, salas de exposiciones, eventos deportivos, fiestas tradicionales?, un lugar donde siempre se puede disfrutar de un buen plan.

¡Y de un buen vino!

Además de los bares, restaurantes y vinotecas, la escena vinícola de León también incluye, a las distintas bodegas que se encuentran en su entorno. Aprovechar la estancia en la ciudad para descubrir lugares como Bodegas Vitalis, Bodegas y Viñedos Casis, Gordonzello, Pardevalles y Tampesta, entre otras, supone vivir al máximo la gran tradición vitivinícola de estas tierras, incluyendo los vinos de las dos variedades de uva autóctonas, y prácticamente únicas en el mundo, el prieto picudo y el albarín blanco, pero también los mencía, los godello, los verdejo?

Catas, visitas a bodegas y viñedos, eventos enogastronómicos, centros de interpretación y espacios dedicados a la cultura de la vid y el vino? León es un es un auténtico viaje con los cinco sentidos por la historia y la cultura enogastronómica.