El Principado ha salido al paso tras las acusaciones, críticas y polémica surgidas por el plan de vacunación y la inmunización de sanitarios de primera línea. La gerente del Servicio de Salud del Principado (Sespa) ha admitido que se ha inmunizado tanto a directivos sanitarios como a liberados sindicales dentro del grupo de sanitarios de primera línea, pero ha defendido que se ha hecho conforme al protocolo establecido desde el Ministerio de Sanidad.

"Los equipos directivos, según dice el ministerio, según su ámbito competencial en salud publica y su papel en la logística, planificación y gestión de la pandemia y según su grado de exposición al igual que el resto de profesionales, deben vacunarse con los profesionales de primera línea -cuya inmunización ya ha comenzado en Asturias- o en el siguiente grupo -que en algunas áreas ya ha comenzado a inmunizarse-", defendió Concepción Saavedra, gerente del Sespa, que agregó: "Durante esta pandemia estos equipos han tenido un papel clave y han estado en el territorio codo con codo con otros profesionales; no han estado metidos en su despachos sino en el día a día".

Asimismo, Saavedra ha justificado otro de los puntos polémicos: la vacunación de sanitarios que se encuentran liberados de sus tareas en primera fila para ejercer labores sindicales. Es el caso de la concejala de Castrillón suspendida de militancia temporalmente por el PSOE a la espera de que se aclaren las circunstancias de su inmunización.

"Dentro de la primera línea se ha hecho vacunación de todos los profesionales independientemente de su categoría e independientemente de su situación actual, como puede ser la liberación sindical. Dada la situación epidemiológica puede ser necesario que puedan ser reactivados en sus trabajos voluntariamente, como ya ha pasado, o de forma general por la administración si así se requiere", aclaró la gerente del Sespa.

Saavedra defendió asimismo que "la planificación y logística nos ha permitido vacunar al mayor número de personas en el menor tiempo posible, siempre que el abastecimiento nos lo permita". A lo que añadió: "El abastecimiento es nuestra única cortapisa".

La gerente del Sespa explicó también que se lleva al día el registro de los vacunados para su completo control. "Para la vacunación tenemos un sistema de información propio de manera que se registra en el mismo momento del acto vacunal, por lo que sabemos exactamente a quién y cuándo se ha vacunado. Esto nos permite tomar medidas si fuera necesario", aseguró Saavedra.

El Gobierno de Asturias aseguró que "continuará informando con total transparencia durante los próximos días sobre la evolución del proceso de vacunaciones en nuestra comunidad autónoma". Y quiso matizar que entre los directivos vacunados no se encuentran "ni el presidente Adrián Barbón, ni los consejeros, ni los viceconsejeros, ni los directores generales, ni siquiera la gerente del Servicio de Salud".

Nueva remesa y a un ritmo del 96,08%

 El Gobierno de Asturias recibió hoy la quinta remesa de la vacuna de Pfizer- BioNTech, que permitirá "no solo garantizar la segunda dosis a las personas inmunizadas en la segunda semana de la campaña, sino también aumentar el ritmo de administración a los profesionales sanitarios, que se ralentizó como consecuencia de la disminución del número de viales distribuidos por la farmacéutica".

Por otro lado, desde la Consejería destacaron que "el ritmo de vacunación alcanza el 96,08%, según los datos correspondientes al día 22, los últimos actualizados por el Ministerio de Sanidad". Y resaltó que el Principado "continúa siendo una de las comunidades más ágiles en este proceso".

Del mismo modo, desde el gobierno regional de Barbón se incidió en que "la planificación general de la campaña en el Principado se realiza en función de criterios prioritarios fijados en la estrategia, de los grupos a vacunar, de las dosis previstas, de las pautas establecidas y de los condicionantes operativos. En este sentido, la logística corresponde a cada área sanitaria y se adapta a las circunstancias particulares de cada grupo que se vacuna".

En la primera etapa definida por el ministerio, "se ha dado preferencia a los cuatro grupos prioritarios: en el primero están incluidos los residentes y personal sanitario y sociosanitario de residencias de mayores y de atención a grandes dependientes; el grupo 2 engloba al personal sanitario y sociosanitario de primera línea; mientras que el 3 incluye al resto de profesionales sanitarios que trabajan en los centros de atención primaria y hospitalarios, así como a los que desarrollan su labor en otros ámbitos y atienden a pacientes sin mascarilla durante un tiempo superior a 15 minutos (por ejemplo, centros de odontología y cirugía maxilofacial, entre otros). En este grupo también se incluye al personal sociosanitario que no es de primera línea y que asiste, de manera profesional, a grandes dependientes no institucionalizados. Por último, en el grupo 4 se vacunará a grandes dependientes (grado III) y a las personas que les cuidan".

El Sespa explica que "para organizar el plan de vacunación del grupo uno se solicitó a través de cada área sanitaria un listado de residentes y trabajadores de centros sociosanitarios (incluyendo a todas las personas que desempeñan su labor allí, sean sanitarios o no)".

Segunda etapa de vacunación

 El siguiente grupo de población para vacunar es 5, correspondiente a personas de más de 80 años que presenten mayor riesgo de enfermedad grave y fallecimiento. "Este sector comenzará a recibir la vacuna cuando el suministro de las dosis sea suficiente", manifiesta el Principado. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) correspondiente a enero de 2020, en Asturias este grupo incluye a 87.826 personas: 57.544 mujeres y 30.282 hombres, que representan un 8,6% de la población.