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Los profesores asturianos estallan: “Es una auténtica vergüenza el trato que se da al profesorado, aún sin vacunar”

El sindicato mayoritario en la enseñanza pública, ANPE, critica que el Principado está “a la cola del país” en administración de dosis a los docentes, pese a que “tras los sanitarios somos los más expuestos al virus”

Una persona se vacuna con AstraZeneca.

“Es una auténtica vergüenza el trato que se da en Asturias al profesorado; como si fuésemos empleados de segunda”. Gumersindo Rodríguez, presidente de ANPE, el sindicato mayoritario en la enseñanza pública, no ha tardado en reaccionar al monumental cabreo que arrastran los docentes por los retrasos en la vacunación. Pese a lo que dice el Principado, ni siquiera todas las maestras de Infantil y Educación Especial han sido protegidas frente al virus y eso que son profesionales que están muy expuestas, ya que están en clase con niños sin mascarilla. Rodríguez echa más leña al fuego y asegura que la comparativa con otras comunidades autónomas es “demoledora”. “Estamos a la cola del país”, denuncia. 

El responsable de ANPE tira de números en los que la enseñanza asturiana sale muy mal parada: “Los 33.000 docentes de Galicia están todos vacunados desde hace casi un mes; los 120.000 de Cataluña ya han recibido la primera dosis y un 30% tiene la segunda; los 100.000 de Madrid están todos protegidos; los 125.000 de Andalucía tienen puesta la primera inyección; el 90% de los 15.000 de Baleares están vacunados; el 85% de los 8.000 de Cantabria lo mismo; los 7.000 de La Rioja todos recibieron una dosis...”. ¿Y en el Principado? La mayoría sigue esperando como agua de mayo a ser citados. Algunos temen incluso haber quedado “en el limbo”, tras haber sido llamados antes de que Sanidad cancelase la administración de AstraZeneca, y no recibir ninguna noticia más desde entonces.  

Al igual que defendieron en LA NUEVA ESPAÑA una representación de profesores, Gumersindo Rodríguez insiste que “tras los sanitarios, nadie corre más riesgo que los docentes, que día a día entran en espacios cerrados con decenas de alumnos”. “Se dice que es colectivo esencial, pero lo cierto es que nos ningunean y han pospuesto al colectivo”, se queja. “La administración tiene que actuar sin demora –prosigue–, valorando el riesgo de la exposición al contagio y ofreciendo información pública y directa que clarifique la situación de este colectivo profesional”. Porque otra de las críticas del profesorado es que hay precisamente desinformación y caos, pues ya no saben el criterio que sigue la Administración para vacunar. “Empezaron por Infantil y Educación Especial, luego pasaron a los mayores y ahora ya llaman aleatoriamente”, protestaron a este periódico. Incluso, están siendo inoculados personal de administración y servicios, limpiadoras y personal de prácticas antes que los propios docentes. 

La plantilla pública en Asturias, con más de 13.000 profesores, se siente abandonada a su suerte, con sucesivos cambios de estrategia no suficientemente explicados, y divulgados sólo a través de la prensa. Ni siquiera la consejería de Educación ha dictado una circular explicativa, al carecer de información de primera mano. “¿Dónde está la Consejera?”, nos pregunta el profesorado”, remata Gumersindo Rodríguez. Lo cierto es que la queja por el retraso en la vacunación no es algo exclusivo de ANPE, sino que desde hace semanas es compartido por el resto de organizaciones sindicales. A las vacunas se suma también, según dicen, la falta de mascarillas FFP2, y de medidores de C02 “que Barbón aconseja para los bares pero no pone en sus escuelas”.

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